La Bundesliga está suspendida al menos hasta el 2 de abril, aunque no es seguro que se reanude en esa fecha. Mientras los clubes siguen pagando sus salarios, el parón ha congelado los ingresos por venta de entradas y parece inminente el colapso de los jugosos contratos de televisión y de patrocinio.
Así, ya han comenzado los llamamientos para que las estrellas del deporte mejor pagadas acepten recortes de sueldo. Y entre ellos, ha destacado el del primer ministro del estado de Baviera, Markus Söder.
Sobre este problema, la Serie A también ha empezado a mover ficha. “Pediré al Gobierno que tenga la posibilidad de renegociar algunos contratos para crear un sistema de asistencia dentro del fútbol”, ha indicado a Radio24 el presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), Gabriele Gravina.
“Esto no debe ser mal visto. No puede ser en un momento de emergencia, principalmente cuando se trata de estipendios muy altos”, ha subrayado Gravina.