Canadá se consagró campeón olímpico en el torneo de fútbol femenino de Tokio-2020 al derrotar por 3-2 en los penales a Suecia, este viernes en Yokohama tras 1-1 en los 120 minutos de juego, colgándose su primera medalla de oro de la historia y de paso celebró su primer título grande.
Las suecas, que habían caído en la final de Rio-2016 frente a Alemania, anotaron por intermedio de Stina Blackstenius (34), tras un desborde por derecha de Kosovare Asllani. Jessie Fleming, volante del Chelsea, marcó para Canadá de penal (67), antes de que llegase la lotería de los penales.
En esa definición, para Canadá convirtió Fleming, Deanne Rose, Julia Grosso, mientras que le atajaron a Ashley Lawrence y Adriana Leon, y falló Vanessa Gilles. Pero las escandinavas estuvieron más erráticas: marcaron solo Nathalie Bjorn y Olivia Schough y erraron Asllani y la capitana Caroline Seger—que pudo marcar el gol del título—y le atajaron a Anna Anvegard y Jonna Andersson.
Las canadienses lideradas por la veterana Christine Sinclair suben a lo más alto del podio olímpico, tras los bronces de Londres-2012 y Rio-2016.
En Canadá, Quinn, mediocampista, fue la primera deportista transgénero que se cuelga una medalla olímpica en toda la historia de los Juegos.
Las suecas, número cinco mundiales, tuvieron las chances más claras y también el oro al alcance de la mano con el penal que erró Seger, además de haber mostrado un camino más estable hasta la final con cinco victorias seguidas: 3-0 a Estados Unidos, 4-2 a Australia y 2-0 a Nueva Zelanda en fase de grupos, para luego imponerse 3-1 a Japón en cuartos y 1-0 a Australia en semifinales.
En cambio, las canadienses habían tenido un derrotero más dubitativo. En su zona pasó como segundo, al igualar 1-1 ante Japón y Gran Bretaña y vencer 2-1 a Chile. Ya en cuartos, venció a Brasil 4-3 por penales tras 0-0 y luego en semifinales quebró a Estados Unidos (1-0), rompiendo todos los pronósticos.