Neymar tiene acostumbrados a sus fanáticos a sus originales looks. Lo hemos visto con el cabello rosado, cenizo, rubio y hasta con rastas.
Pero el brasileño parece haberse aburrido de sus excéntricos looks y ha optado por uno más sobrio: se ha rapado la cabeza.
Sin embargo, el cambio no ha pasado desapercibido por sus seguidores de Instagram, quienes lo han comparado con Ragnar de la serie Vikingos.