Instalado en un alojamiento diferente al del resto de tenistas, el serbio Novak Djokovic dijo que solo se decidió a participar en el Abierto de Estados Unidos de 2020 menos de una semana antes de viajar a Nueva York por los riesgos de la pandemia de coronavirus.

"Estuve muy cerca de no venir (...) Había muchas incertidumbres", dijo el número uno mundial en una entrevista con el diario The New York Times publicada este jueves.

Djokovic, ganador de 17 torneos de Grand Slam, reconoció que su objetivo de alcanzar la marca de 20 títulos del suizo Roger Federer "por supuesto" fue un factor importante para competir en el US Open, que se disputará a puerta cerrada entre el 31 de agosto y el 13 de septiembre.

"Una de las razones por las que sigo jugando al tenis profesional a este nivel es porque quiero alcanzar más cimas en el mundo del tenis", dijo Djokovic, que ha ganado cinco de los últimos siete torneos de Grand Slam.

El serbio solo confirmó su presencia en Nueva York, donde no estarán presentes ni Federer ni Rafa Nadal (número dos mundial), después de que funcionarios de gobiernos europeos aseguraran a sus tenistas que no tendrán que enfrentar una larga cuarentena al regresar de Estados Unidos.

Djokovic, de 33 años, se hospeda en una casa de alquiler en Nueva York mientras la mayoría de los jugadores están concentrados en un hotel como parte de los protocolos para resguardar al torneo de la pandemia de coronavirus, que impidió la presencia de espectadores este año en Flushing Meadows.

"Quiero jugar, por eso estoy aquí", subrayó Djokovic. "Personalmente no tengo miedo de estar en una situación de riesgo y peligrosa para mi salud. Si me sintiera así, lo más probable es que no estaría aquí".

El serbio ha encabezado la clasificación mundial durante 282 semanas y aspira también a superar el récord de Federer de 310 semanas en el número uno.

Sin Federer, lesionado, ni Nadal, que renunció a viajar por los riesgos de la pandemia, Djokovic dijo que sintió la responsabilidad de competir en el Abierto para evitar restarle prestigio a esta edición.

"No puedo decir que sea la razón principal por la que estoy aquí, pero es una de las razones", afirmó. "En primer lugar, tengo que pensar en mí y en mi salud y en mi estado físico y si mi equipo está bien para estar aquí".

"A partir de ahí, por supuesto, también me sentí responsable como un jugador de alto nivel de estar aquí. Es importante para nuestro deporte seguir adelante", señaló.

Djokovic defiende su Adria Tour

En la entrevista, desarrollada por videoconferencia, Djokovic defendió su decisión de organizar el torneo benéfico Adria Tour en junio en Serbia y Croacia, que generó una gran polémica por la falta de medidas de protección ante el coronavirus, la presencia de espectadores en las gradas y una fiesta en un club nocturno.

Djokovic, que dio positivo por COVID-19 en el marco del torneo al igual que otros tenistas como el búlgaro Grigor Dimitrov, dijo que sus síntomas fueron leves y duraron entre cuatro y cinco días, incluyendo fatiga y cierta pérdida de olfato y gusto, pero sin fiebre.

En el Adria Tour "intentamos hacer algo con las intenciones correctas", dijo Djokovic. "Sí, hubo algunos pasos que podrían haber sido hechos de manera diferente. Pero ¿voy a ser culpado para siempre por cometer un error?"

"Si tuviera la oportunidad de hacer el Adria Tour de nuevo, lo haría de nuevo", sostuvo.

Respecto a los protocolos que podrían establecerse en el circuito de la ATP con una vacuna del coronavirus, Djokovic dijo que le preocupa que le impongan su aplicación.

"Medios de comunicación internacionales han sacado eso un poco de contexto, diciendo que estoy completamente en contra de las vacunas de cualquier tipo", dijo. "Mi problema con las vacunas es si alguien me obliga a poner algo en mi cuerpo que no quiero. Para mí eso es inaceptable".

"No estoy en contra de la vacunación de ningún tipo, porque ¿quién soy yo para hablar de vacunas cuando hay gente que se ha dedicado a la medicina y a salvar vidas en todo el mundo?", recalcó.