A través de un comunicado colgado en redes sociales, la Fesfut asegura que “de acuerdo con sus principios fundamentales consignados en los estatutos prohíbe terminantemente cualquier forma de discriminación política, religiosa, de sexo, étnica o racial”.
Y agregó que “esta Federación, respetuosa de las leyes de la República, deja a las autoridades competentes el cumplimiento de su deber y en cuanto a las leyes deportivas, se tomarán medidas procesales pertinentes”.
Por lo tanto, de encontrarse culpables, la institución “deja constancia que como entidad rectora del fútbol nacional repudia, rechaza y no admite los tipos de conducta que violenten los principios estatutarios y normas internacionales que rigen a la Fesfut”.
El caso
Los señalados son el director técnico de la sub-20 femenina, Elmer Guidos, el auxiliar, David Hernández y el preparador físico, Carlos Cortez, involucrados en casos de acoso sexual y discriminación por su opción sexual previo al eliminatorio UNCAF 2018 realizado en Bradenton, Florida, Estados Unidos.
De acuerdo a la publicación en mención, al menos siete seleccionadas nacionales relataron sus testimonios sobre los encuentros que tuvieron con los presuntos victimarios donde fueron sometidas a “tocamientos”, reubicación de las habitaciones en la casa de IMG Academy en Bradenton, según su opción sexual y acusaciones luego de las derrotas abultadas que sostuvieron frente a Costa Rica y Panamá.