Cortar el césped, jugar con el perro o ver la televisión... Los futbolistas profesionales tratan por todos los medios de pasar el tiempo de inactividad provocado por el nuevo coronavirus que ha detenido todas las competiciones, aunque algunos advierten que "no hay nada que hacer".
En España, la cuarentena en el Real Madrid obliga a los jugadores a encontrar maneras de entrenarse en casa. La mayoría dispone de gimnasios en el domicilio. Así se ha podido ver al capitán Sergio Ramos corriendo por una cinta, al francés Raphaël Varane levantando pesas o al joven Marco Asensio, que se recupera de una grave lesión de rodilla, seguir su programa de rehabilitación en el jardín.
Pero para muchos deportistas, habituados al ejercicio extremo, el trabajo en casa es bastante aburrido. "Aquí estoy, en mi jardín, sin nada qué hacer", lamentaba el delantero merengue Karim Benzema en un video publicado en Instagram en el que apareció junto a su perro, lo que le valió la comparación con la película postapocalíptica 'Soy leyenda' de Will Smith.
En el Barça, los jugadores siguen un programa "específico y personalizado" y el trabajo en casa está controlado a distancia por los médicos y preparadores físicos del club gracias a unas balizas biométricas que calculan sus esfuerzos.
Matar el tiempo
Después de la detección de un caso positivo en el equipo de baloncesto del Real Madrid, todos los equipos profesionales del club blanco (fútbol y básquet) fueron puestos en cuarentena el jueves por un periodo de 15 días como medida de prevención, tomada por el hecho de que ambos equipos comparten las instalaciones del centro de entrenamiento de Valdebebas.
Fabien Causeur, armador del equipo de básquetbol, inició por ejemplo el desafío #CuarentenaChallenge, que consiste en realizar tres minutos de fortalecimiento muscular, en pareja, e invitar a otras personas a hacer lo mismo.
El jugador también aprovechó para lanzar el viernes su canal Twitch, una plataforma de difusión en directo a menudo utilizada por los jugadores de videojuegos. Se le pudo ver, por ejemplo, jugando con un famoso 'streamer' español, Ibai Llanos, con el arquero belga Thibaut Courtois, con su compañero de equipo Facundo Campazzo o con la estrella eslovena de la NBA Luka Doncic, exjugador del equipo blanco.
En Italia, el brasileño de la Juventus Douglas Costa se grabó tratando de regatear a su perro en la terraza de su domicilio, donde está confinado.
'El espectáculo debe continuar'
En Francia, el centrocampista del Estrasburgo Adrien Thomasson mostró su temor a la retoma de los entrenamientos. "El nivel de exigencia bajará (tras la inactividad), algo que nunca ha ocurrido en plena temporada. Nuestras costumbres se van a ver alteradas por completo", explicó el jugador, que dice que se enfrentarán a algo desconocido, a un "gran vacío".
"Voy a ver series, películas, vamos a estar realmente limitados", añadió.
La televisión será también el refugio elegido por James Lea Siliki, centrocampista del Rennes.
En Inglaterra, Shkodran Mustafi, defensa alemán del Arsenal, cuyo entrenador Mikel Arteta ha dado positivo al COVID-19, se filmó lavándose las manos, una de las medidas que preconizan las autoridades para evitar el contagio, y dando toques con el balón junto a sus hijos.
Y el Watford, que tiene a al menos tres jugadores contagiados, publicó en sus redes la simulación del partido que tenían este fin de semana contra el Leicester con un famoso videojuego con el lema "El esepctáculo debe continuar".
El tiempo libre también da para organizar campañas solidarias, como la del francés del Manchester United Paul Pogba, que este domingo lanzó una colecta de fondos para comprar guantes para el personal sanitario, máscaras y gafas de protección contra el coronavirus.
En sólo unas horas ya se recolectaron 27.000 libras esterlinas.