Leonor Selva, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), explicó que la gremial ve factible que el Producto Interno Bruto (PIB) crezca en una tasa del 10.3 % en 2021, como lo anticipa el Ejecutivo, pero alertó que el “efecto rebote” que permitió alcanzar ese desempeño se agota.

Selva sostuvo que, según los análisis hechos por la gremial, los principales indicadores de la economía regresan a valores de antes de la pandemia, es decir, en un ciclo de “bajo crecimiento”.

“El efecto rebote nos permite ese crecimiento del 10 %, pero a partir de ahora lo que vemos es que el país vuelve a la normalidad”, dijo en una entrevista el lunes en Canal 21.

ANEP respalda la idea de que la pujanza del sector exportador y de las remesas enviadas por los salvadoreños residentes en el exterior han hecho que la economía incluso supere los registros que se tenían antes de la pandemia.

Según datos del Banco Central de Reserva (BCR), entre enero y octubre, el país vendió productos al exterior por unos $5,494 millones, mientras que las remesas llegaron a los $6,142 millones, indicadores que crecen al 34 % y 29 % contra el mismo mes de 2020, respectivamente.

 

Condiciones.


El agotamiento en el ritmo de crecimiento se convierte en un reto importante para la política económica en un momento en el que el mundo resiste una mayor inflación derivada de la crisis logística internacional.

“Esto nos coloca en una encrucijada. Este es el momento de tomar las decisiones correctas y es donde nos preocupan las que se están tomando”, dijo Selva.

La directora ejecutiva de la ANEP advirtió el país podría volver a las tasas que se tenían antes de la pandemia, es decir, crecimientos del PIB entre el

2 % y 3 %, ritmo que considera insuficiente para satisfacer las necesidades de empleo que se generan en el territorio.

“En los últimos seis meses, las decisiones tomadas han generado demasiada incertidumbre y riesgo”, valoró.

La gremial ve retos importantes en el ritmo del endeudamiento, el cual Selva califica de “histórico”.

“A pasar de que este año el Gobierno va a tener más impuestos de lo que ha tenido en las últimas décadas… recaudó más, pero gasta más, pareciera que el dinero no está alcanzando a pesar de que contribuimos muchísimo más y eso nos preocupa”, dijo,

Otro punto que la ANEP ve con preocupación es la degradación del riesgo medido por el Indicador de Bonos de los Mercados Emergentes (EMBI, por sus siglas en inglés), un instrumento calculado por el estadounidense JP Morgan Chase que estima el interés que pagaría una emisión de bonos.

El lunes 13 de diciembre, el EMBI de El Salvador alcanzó un nuevo récord: 13.88 puntos base, contra los 7.32 registrados al cierre de 2020 y se mantiene como tercero de Latinoamérica por detrás de Venezuela (404.24) y Argentina (17.17)

Selva sostuvo que, dadas las condiciones actuales, “endeudarse se vuelve más caro porque el Estado se percibe como maás irresponsable”.

Otro punto en la agenda de la empresa privada es el acelerado deterioro de la relación con Estados Unidos, principal socio comercial del país y origen de remesas.

“Una de las cosas que más preocupa al sector económico es cómo ha escalado el tono de la relación con EE.UU. pasamos de la promesa de tener las mejores relaciones con EE. UU. a las peores desde el conflicto armado”, dijo Selva que consideró que el diálogo es urgente para estabilizar la relación y tener la certeza de que acuerdos como el Tratado de Libre Comercio sigan intactos.

 

El dato


En 2021, la economía salvadoreña será, solo después de la panameña, la segunda con el mejor desempeño luego del impacto que generó la pandemia del covid-19 en 2020.

 

Motores de la economía


El 2021 es uno de los años con el mejor desempeño de los que se tiene registro. Estos son los motores:

 

  1. Remesas


Las remesas, que provienen principalmente de Estados Unidos, cerrarán el año con un nuevo récord. Hasta octubre se habían recibido $6,142 millones.

 

  1. Exportaciones


El despegue de las ventas de la industria textil y de la confección, entre otros, permitirán un nuevo récord en 2021: $6,500 millones.

 

  1. Importaciones


A pesar de ser afectadas por la crisis logística, las empresas hacen un mayor esfuerzo para importar bienes de capital. Alcanzan los $12,348 millones.