Los ahorros aumentaron en 2020 por la incertidumbre ante la pandemia.


La cartera de depósitos cerró el tercer trimestre de 2021 con una caída tras crecimientos explosivos el año pasado. Pero los bancos advierten que esa merma no es una señal de alarma sino que es un reflejo de que los salvadoreños están usando sus ahorros para invertir.

La caída en el consumo por el cierre de la economía y la incertidumbre por la pandemia del covid-19 empujaron a que los salvadoreños ahorraran más en sus cuentas bancarias a lo largo de 2020. Pero ese dinamismo se revierte para 2021 y al tercer trimestre cerró con una caída del 0.2 %.

El último informe de la Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa) indica que los depósitos en el sistema bancario alcanzaron a septiembre $15,217.8 millones, un crecimiento interanual de $615.2 millones (un 4.2 %) contra el saldo de $14,601.6 millones observados al mismo mes en 2020.

Sin embargo, al comparar diciembre del año pasado, cuando la cartera cerró con $15,285.7 millones, hay una baja de $32.5 millones, una caída de -0.2 % en nueve meses.

“¿Por qué disminuyen? Porque esa plata se está usando o se está invirtiendo”, indicó Alexander Pinilla, vicepresidente de Finanzas de Bancoagrícola, al tiempo que destacó que contrario a esa baja en los créditos de vivienda y capital productivo hay crecimientos positivos.

El ejecutivo destacó que la desaceleración en los depósitos se comenzó a observar desde mayo de 2021. En el caso de Bancoagrícola, el principal banco de la plaza salvadoreña, hay una reducción en el saldo por alrededor de $127 millones (3.1 %) pero viene de registrar un crecimiento del 13 % en 2020.

En esa misma línea, Fernando González, presidente BAC Credomatic, explicó que la reducción en los depósitos es porque “una parte se está yendo a inversión y porque las personas lo han pasado a depósitos de plazo más corto”.


Mayor caída en depósitos a plazo.


Los datos de Abansa indican que hay una migración de los depósitos con contrato de plazo hacia los depósitos a la vista (cuenta corriente, ahorro y cuenta de ahorro simplificada).

Los depósitos a la vista mantienen una tendencia de crecimiento de 10.4 % interanual, con un aumento de $918.4 adicionales al pasar de una cartera de $8,833.5 millones en septiembre de 2020 a $9,751.9 millones al mismo mes en 2021.

También se mantienen en terreno positivo al comparar contra diciembre de 2020 con un crecimiento de 3.1 %.

Sin embargo, la baja se observa en los depósitos a plazo donde se tienen cuentas pactadas hasta un año o a más de un año de vencimiento. En este segmento la caída interanual fue del 5 %, al pasar de una cartera de $5,458.8 millones a $5,187.6 millones, $271.2 millones menos en un año.

Contra los resultados de diciembre de 2020, la baja es mayor a 6.2 % y significó una reducción de $341.1 millones menos.
Después de ese ciclo de crecimiento muy alto en depósitos a plazo, lo que viene hoy es una migración a cuentas a la vista, crecen y absorben. Se está utilizando el dinero. ¿Quién lo está utilizando? Todos”.
Alexander Pinilla
Vicepresidente de Finanzas de Bancoagrícola

Por un lado, el Gobierno utiliza sus depósitos para comprar vacunas contra el covid-19 y el inicio de ejecución de los proyectos de infraestructura, mientras que las empresas utilizan sus depósitos para invertir, construir e incluso para adelantar inventario de cara la crisis logística mundial, explicó Pinilla.