La autónoma lanzó el lunes la licitación internacional para la ampliación de las actuales instalaciones de la terminal de carga en el aeropuerto Romero y la construcción de nueva infraestructura, a través de un asocio público privado. Un APP es una herramienta política para movilizar inversión privada para desarrollar un bien o servicio público a cambio que se le permita su explotación en concesión de largo plazo, mientras que en una privatización es la transferencia permanente al privado de un activo ya existente.
El concurso “no es una privatización del aeropuerto Romero” y, aseguró Anliker, que los APP no se concretaron con la anterior administración del Ejecutivo porque “eran politizados”.
El concurso se plantea con una inversión total por $57 millones. Una primera etapa incluye $13 millones, con impuestos, para la ampliación; mientras que la segunda fase será para una nueva infraestructura por $44 millones.