Decenas de personas han fallecido o permanecen desaparecidos ya que los restos del huracán Eta desataron inundaciones y provocaron deslizamientos de tierra en su mortal marcha por Centroamérica./AFP.


Fuertes lluvias y vientos, deslizamientos de tierra e inundaciones desatadas por Eta después de tocar tierra en Nicaragua, a principios de este mes, dejaron un saldo de decenas de muertos y daños en infraestructuras a su paso por Centroamérica, incluyendo Belice, Guatemala y Honduras.

De acuerdo con el Programa Mundial de Alimentos de la ONU (WFP, por sus siglas en inglés), el huracán agravó la inseguridad alimentaria que ya había aumentado la pandemia de coronavirus.

Según la ONU, el Corredor Seco de Centroamérica (El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua) tuvo cinco años de sequía prolongada y cosechas fallidas debido a patrones climáticos erráticos, lo que dejó a los pequeños agricultores, jornaleros y sus familiascon dificultades para tener alimentos.

Las personas afectadas por el paso del huracán Eta cargan racimos de plátanos al salir de los campos bananeros, en el sector El Progreso, departamento de Yoro, Tegucigalpa./AFP.


En este sentido, El Programa Mundial de Alimentos advierte que el número de personas que padecerán hambre en el Corredor Seco podría aumentar de más de 1,6 millones en 2019 a cerca de 3 millones en 2020.
Para evitar que la situación se convierta en una crisis humanitaria mayor, WFP apela a los donantes a aumentar su apoyo”. Miguel Barreto, Director Regional para América Latina y el Caribe del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.

Barreto indicó que, como WFP, se ha destinado $13,2 millones para asistir a las personas más vulnerables y esperan que la cifra aumente durante las próximas semanas a medida que se aclare el alcance del impacto de Eta.

Eta fue el huracán número 28 en una temporada ciclónica récord.

Personas afectadas por el paso del huracán Eta transportan gallinas en la vía que conecta la ciudad de El Progreso, departamento de Yoro, con el municipio de La Lima, departamento de Cortes./AFP.


Al mismo tiempo, el Programa de la ONU muestra su preocupación ante el desarrollo de la nueva Depresión Tropical Treinta y Uno. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos indicó que existe el riesgo de impactos peligrosos de vientos, marejadas ciclónicas y lluvias en partes de Nicaragua y Honduras a partir del domingo por la noche.

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Eta devastó más de un millón de niños en Centroamérica


Unicef clacuó el miércoles que más de 110.000 personas, incluidos unos 44.000 niños, fueron evacuadas a refugios temporales en los siete países del istmo.

El director regional interino de Unicef para América Latina y el Caribe, Bernt Aasen, comentó que muchas familias han perdido sus hogares o quedaron varadas en los techos, bloqueadas en áreas inundadas, sin electricidad y aisladas del resto de sus comunidades.

Unicef prevé que las necesidades de los niños afectados crecerán en los próximos días, y ha repartido equipos de higiene, tanques de agua, tabletas de desinfección, pruebas para el control de la calidad del agua y materiales recreativos.