La Defensoría del Consumidor vigilará que los centros educativos no alteren los precios de los útiles escolares así como las cuotas y matrículas en el inicio del año escolar 2020.
La institución -junto al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología- ha realizado una serie de talleres de divulgación de la normativa aplicable a colegios privados con el objetivo de instruir a representantes de dichas instituciones sobre la Ley de Protección al Consumidor.
Mauricio Lozano, técnico legal de la Defensoría del Consumidor, explicó que existen circunstancias en las cuales los colegios privados tienen calidad de proveedores y quien contrata, en este caso padres de familia, se convierten en consumidores.
“Cuando realizan venta de uniformes, cuando venden libros de texto, calzado y otros útiles escolares, tienen certeza de calidad de proveedores, y en consecuencia en estas relaciones están bajo el ámbito de la Ley de Protección del Consumidor y bajo la tutela de la Defensoría”, agregó el funcionario.
Bajo ese concepto, se espera que los colegios otorguen el derecho a la reversión de pago, así como la divulgación de información completa de los productos comprados y evitar la publicidad engañosa. Las instituciones educativas también deben entregar garantía de los artículos y no cargar las compras con tarjetas de crédito.
De presentarse “algunas quejas” se procederá a “realizar visitas en conjunto con la Defensoría”, a las instituciones educativas, indicó Juan Carlos Arteaga, director nacional de Gestión Educativa Interina. De esa forma, se impulsará una “mejora de todos los servicios”, para la defensa de los derechos del consumidor.
Ambas instituciones realizaron talleres formativos con los centros escolares privados en Santa Ana, San Miguel y San Salvador. Se espera que unos 900 colegios conozcan no solo sus deberes sino que, además, los padres de familia tengan presente cuáles son sus derechos al momento de comprar.