La innovación es el único vehículo para conciliar y enfrentar al cambio climático, la integración social y el uso masivo de tecnología móvil, aseguró Gonzalo Rivas, jefe de la división de competitividad, tecnología e innovación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El experto, de origen chileno, participó este lunes en la inauguración de la Semana de Innovación que realiza la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI) del 1 al 5 de julio, un cónclave “para resolver problemas y rutas críticas del sector sobre la verdadera realidad de la cuarta revolución industrial”, indicó Eduardo Cáder, presidente de la gremial.
En esa economía digital se evidencian tres tendencias que “hacen el tema relevante”, aseguró Rivas. La primera es el cambio climático que requiere “con urgencia feroz” reducir las emisiones de gases contaminantes, y la segunda recae en cómo integrar la clase media a la distribución de recursos del crecimiento económico.
La tercera, agregó, es el uso masivo de teléfonos móviles como vehículo de comunicación. “La única manera de conciliar es a través de innovación, porque básicamente a lo que estamos siendo obligados todos es a cambiar, a hacer las cosas de una manera distinta”, comentó.
Sin embargo, en el proceso de “innovación abierta” se evidencia que las grandes empresas no tienen la destreza de adoptar los acelerados cambios tecnológicos, al igual que el gobierno no puede competir con urgencia. En este espacio, se abre una ventana de oportunidad para los emprendimientos de soluciones, indicó Rivas.
“Para que esto funcione tiene que tener un ecosistema, incubadoras, aceleradoras, emprendimientos, y en la medida de tener eso el Estado puede aprovechar”, comentó.
En esa misma línea, Carmiña Moreno, representante del BID, aseguró que la innovación puede ser parte de la respuesta sostenible a la exclusión social, desigualdad e incremento de la competitividad.
“Nuestro diagnóstico es que El Salvador aún puede aprovechar más los beneficios que las nuevas tecnologías pueden tener sobre mejoras de eficiencia y productividad, y esto a su vez a la competitividad y crecimiento económico”, sumó la vocera.
El BID inició un diálogo con el nuevo Gobierno para contribuir en la digitalización del país con miras a 2024. “Sentimos que El Salvador debe trabajar (…) en capital humano, infraestructura para la conectividad, y fortalecer a la instituciones dedicadas al apoyo de la innovación pública y privadas”, comentó.
EE.UU.: es un momento ideal para innovar
Mark Jonhson, ministro consejero de la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, comentó que “ahora es un momento ideal” para preparar la ruta de una agenda de innovación del país en convergencia con la región centroamericana.
“Desde nuestra embajada siempre hemos coincidido que El Salvador tiene un potencial inmenso y una gran riqueza (…) Cuando hablamos de innovación no se trata únicamente sobre nuevas industrias y tecnologías, a veces se trata de tomar un paso hacia atrás y ver el problema desde otra perspectiva”, comentó.
El vocero de la embajada enfatizó que “cuando las metas son claras” los pasos a seguir “se vuelven evidentes” e instó a aprovechar “este momento histórico y la ventana de oportunidad”.