El Salvador se sumó a la tendencia mundial al incorporar a su parque vehicular el primer carro alimentado 100 % con electricidad, el cual realizó sus primeros recorridos este martes por algunas calles de San Salvador y supone el inicio de la movilidad eléctrica en el país.

El modelo Nissan importado desde México por DELSUR constituye el primer paso del proyecto de electromovilidad que ejecuta la casa matriz de la distribuidora, el colombiano Grupo EPM, en los países donde opera. En Medellín, por ejemplo ya se instalaron 20 estaciones de carga.

Roberto González, gerente general de DELSUR, aseguró que la compañía no está interesada en comercializar vehículos, sino en ofrecer una red de estaciones de carga de energía rápida en diferentes puntos de El Salvador, distribuidas en agencias de la empresa, centros comerciales o gasolineras.

Asimismo, DELSUR le apostará a instalar cargadores eléctricos en los hogares salvadoreños por un costo que rondaría los $700. “Nosotros estamos buscando proveer las instalaciones a nivel de residencia y demostrar que esto es factible”, agregó.



Las ventajas

González aseguró que la experiencia de un vehículo eléctrico es similar a conducir un carro automático, pero sin el ruido del motor, con cero contaminación por el no uso de combustibles y con más eficiencia en la capacidad del kilómetro recorrido. Además, supone menos costos en el mantenimiento y mayor facilidad de carga.

Dicho vehículo se desplazará en diferentes puntos de San Salvador y a distancias más largas para la realización de estudios sobre el consumo y autonomía. Según el ejecutivo, la siguiente fase es determinar los costos totales de la importación de carros eléctricos con el apoyo del Gobierno, universidades y los importadores.

Con los resultados de esos estudios, agregó, elaborarán una propuesta técnica para presentarla al Gobierno salvadoreño que contendrá facilitación de trámites, reducción de costos e incentivos fiscales para la importación. Solo en la compra, traslado y documentación del carro, DELSUR invirtió $50,000.

Además, la distribuidora espera presentar una propuesta a la Superintendencia de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET) para contar con un tarifa diferenciada de energía para uso vehicular. “Para que el usuario pueda sentirse motivado a utilizar más su vehículo eléctrico que un carro de combustión interna (gasolina)”, agregó.

Para el proceso de importación, DELSUR contó con el apoyo de la Embajada de Colombia, así como el respaldo de las carteras de Estado del ramo Economía, Hacienda, Medio Ambiente y la Dirección de Aduanas.

En el desarrollo de estudios técnicos se sumará, informó la compañía, la Corporación Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ).