Zona de la construcción de El Chaparral, ubicada en San Luis Reina, en San Miguel, y limítrofe con Honduras. / DEM


El Gobierno central evalúa suspender la construcción de la hidroeléctrica El Chaparral, ubicada en San Luis La Reina, en San Miguel, luego que comunidades aledañas al proyecto bloquearan las calles de acceso y se interrumpieran las obras de trabajo.

“Creo que es mejor detenerlo y pasar el caso a la Fiscalía General de la República (FGR)” indicó en Twitter el presidente de la República, Nayib Bukele, al tiempo que culpó al FMLN de “poner a las comunidades en contra del proyecto”.

“Ahora son tan cínicos que ponen a sus alcaldes a mover a las comunidades en contra del proyecto que ellos mismos hicieron. No se dan cuenta que nos hicieron revisar todo el proyecto y encontramos todo lo que se habían robado”, señaló Bukele.

Las protestas de los lugareños se deben a incumplimientos en proyectos sociales que el anterior gobierno prometió pero que la nueva administración de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (Grupo CEL) los considera “inviables”, según respondió, también en Twitter, Daniel Álvarez, presidente de la empresa estatal.

“Las obras que el FMLN prometió a la comunidad no son viables. No vamos a ceder a ese tipo de presiones, las cosas ya cambiaron”, indicó Álvarez.

El Chaparral es un polémico proyecto de energía hidroeléctrica que, una vez finalizado, inyectará a la red nacional 67 megavatios (MW). Desde el comienzo de su construcción, en 2008, se ha visto involucrado en casos de corrupción, costos sobrevalorados y de protestas de las comunidades.

Para Luis Rodríguez, comisionado presidencial de Proyectos Estratégicos, la central hidroeléctrica “históricamente ha sido un proyecto bastante complejo” y la decisión de suspender su construcción no es “fácil” sino que “requiere un alto grado de determinación”.

“Implica ciertas cosas tanto técnicas como legales. Imagino que se hará el dibujo correcto para que no salgan afectadas las instituciones que han estado trabajando”, indicó.

Pese a las declaraciones de funcionarios, la CEL no emitió una posición oficial sobre si analizará o no cancelar la construcción del proyecto, que se prevé inicie operaciones en el primer trimestre de 2020.

 

Investigación

La construcción de El Chaparral no solo tomará más tiempo sino que costará más. Comenzó con un monto de $220 millones, pero en agosto de 2018 la CEL anunció que la inversión superaría los $400 millones, $180 millones adicionales, por cambios en el diseño original.

El proyecto es además parte de una investigación de la Fiscalía General por negociaciones irregulares con la italiana Astaldi, la primera empresa que tomó la construcción del proyecto pero que dejó incompleta la obra, y aun así recibió un pago de $108.5 millones durante el mandato de Mauricio Funes.