A dicho mes, la institución había cedido $12.2 millones en créditos para la adquisición de una residencia, mientras que en contribución no reembolsable entregó $1.7 millón a 408 familias.
De acuerdo al titular, con esta metodología, FONAVIPO sólo supervisa la correcta ejecución del dinero, mientras que los beneficiados son los encargados de construir sus respectivas viviendas.
Para facilitar dichas obras, indicó Huezo, se ha firmado convenios con algunas alcaldías, como la de Tepecoyo, La Libertad; San Rafael Cedros, en Cuscatlán; y El Paisnal, San Salvador. “Esos alcaldes ponen la mano de obra, y las familias compran los materiales con lo que el Fonavipo les da para la construcción”, agregó.
En el marco del Decreto 505, sobre la transferencia de los terrenos ferroviarios en desuso a favor de familias o entidades de utilidad pública, Huezo explicó que han entregado 300 escrituras a núcleos familiares, entre los cuales algunos tienen hasta 40 años de vivir en la incertidumbre jurídica. Dicho proyecto tiene una cobertura desde La Unión hasta el municipio de Texistepeque, Santa Ana.
“Hemos entregado en contribución como $100,000 a estas familias. Vamos a comenzar a entregar en Usulután, son de 2,500 a 3,000 familias. Para el próximo año puede que ya estemos en Texistepeque”, agregó. Con todos los proyectos de vivienda, el Fondo estima que se han beneficiado a 2,719 familias en todo el país.
2,500 Escrituras
El FONAVIPO planea entregar entre 2,500 y 3,000 escrituras durante el próximo año 2017, indicó la institución.