Durante la comparecencia de El Salvador ante la Comisión de Aplicación de Normas de la OIT, la representación laboral dentro de dicha instancia lamentó que el recién aumento al salario mínimo generara un clima de tensión social, y no un alivio para la población pobre.
“Mientras se espera que el aumento del salario mínimo, desde enero de 2017, mejorara la suerte de la población más pobre, es lamentable que fue seguido por reacciones que alimentaron las tensiones sociales en el país, despidos masivos de algunas empresas y los intentos de reajustar fundamentalmente la jornada laboral de ocho horas”, indica el borrador sobre la intervención del sector laboral compartida por la OIT, en el marco de su reunión anual.
Nuevamente, a El Salvador se le instó a brindar información y avances para esclarecer el caso del asesinato del sindicalista Victoriano Abel Vega, ocurrido en 2010, y del cual aún no se han detallado el paradero.
“Los miembros trabajadores subrayamos la particular preocupación por la situación del país, incluyendo la violencia y la pobreza”, señalaron. Además, “la misión de contacto directo solicitada por la comisión en el examen de 2016, para la aplicación del convenio 87, no ha tenido lugar. Se espera que el gobierno ponga en práctica las conclusiones adoptadas en 2016”, entre las cuales figura el mencionado caso del sindicalista y la reactivación del Consejo Superior del Trabajo (CST).
7 Años
Han pasado desde el asesinato del sindicalista Abel Vega, y el caso aún no se ha esclarecido por las autoridades.