Beyonce instó a una mayor aceptación de las curvas naturales de la figura al afirmar que ella escucha más a su cuerpo tras el nacimiento de sus mellizos por cesárea el año pasado.
La super estrella pop de 36 años, una de las mujeres más fotografiadas del mundo, posó para el último número de la revista Vogue sin maquillaje, ni extensiones de cabello o pelucas.
"Creo que es importante que las mujeres y los hombres vean y acepten la belleza natural en sus cuerpos", señaló en un ensayo que acompaña las fotografías.
Beyonce, casada con el magnate del rap Jay-Z, recordó que había intentado adelgazar rápidamente tras el nacimiento de su primer hijo, Blue Ivy, en enero de 2012.
Pero al revelar detalles por primera vez tras el nacimiento de los mellizos Rumi y Sir, dijo que debió pasar un mes en cama y que su salud había estado en riesgo antes de someterse a una cesárea de emergencia.
Tras dar al luz, Beyonce -quien dijo que llegó a pesar 99 kilos- sintió que "necesitaba tiempo para curarme" de los efectos de la cirugía.
"Durante mi recuperación, me permití tener autoestima y cuidarme, y acepté tener más curvas. Acepté lo que mi cuerpo quería", dijo.
Beyonce tuvo un regreso triunfal a los escenarios en el festival de Coachella en abril, con un espectáculo de casi dos horas con coreografías junto a unos 100 bailarines de apoyo.
Dijo que se preparó para Coachella con una dieta vegana y eliminando el alcohol, café y bebidas frutales de su dieta.