Chile llora este miércoles la partida de uno de sus más célebres artistas, el actor y cantante romántico Lucho Gatica, conocido como el "Rey del bolero", un género que lo catapultó a la escena internacional, donde llegó a influir hasta en los mismísimos Beatles.

Éxitos como "No me platiques", "Tú me acostumbraste" o "Voy a apagar la luz" se repiten en las emisoras locales como un sentido homenaje a Gatica, cuya voz enamoró a varias generaciones y deslumbró a la crema y nata de las celebridades de la segunda mitad del siglo XX.

"Mi padre amaba la música, podía quedarse cantando por horas", afirmó su hija, Juanita, un día después de su muerte, a los 90 años, en la ciudad de México, donde se había radicado hace décadas para expandir desde allí su música a todo el mundo.

Después de alcanzar el éxito en Chile, la carrera musical de Gatica despegó en tierras aztecas, a donde llegó en la década de los cincuenta para probar suerte en un mercado exigente en el que reinaban artistas locales de la talla de Pedro Infante o Agustín Lara.

Gracias a su voz cálida, su mayor cercanía con el público y su sencillez, la fama de Gatica se propagó tanto en la música -grabó más de una decena de discos- como en el cine, donde participó en cerca de 15 películas.

"A México le debo todo lo que soy, porque ese país fue el que me hizo ídolo en toda Latinoamérica", afirmó el cantante en una entrevista después de recibir una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood en 2008.

Los restos de Gatica son velados este miércoles en México, para luego ser cremados, según informó su familia.

- Celebridad -
Gatica nació el 11 de agosto de 1928 en la ciudad de Rancagua, en el centro de Chile. Desde niño quería convertirse en artista y ya con 18 años comenzó a cantar junto a su hermano Arturo en radios de su ciudad, para convertirse pronto en un ídolo nacional.

Una de las anécdotas que se repiten en los medios de comunicación es que solía llamar a las radios distorsionando su voz para que no le reconocieran para pedir que pasaran canciones suyas.

Con una carrera ya consolidada en su país natal, decidió emigrar a México, donde rápidamente se convirtió en una celebridad no solo en Latinoamérica, sino en Estados Unidos y Europa.

En 1953 grabó el bolero "Bésame mucho", de la mexicana Consuelo Velázquez, cuya versión se internacionalizó hasta llegar a los oídos de los Beatles, quienes incluyeron el tema en el álbum "Live! at the Star-Club in Hamburg", grabado en Alemania en 1962.

Durante una visita a Estados Unidos en 1957, Gatica visitó unos estudios cinematográficos en Hollywood para reunirse con Elvis Presley, el rey del rock. La cita fue ampliamente cubierta por los medios, ya que reunía a las principales estrellas de habla inglesa e hispana de la época.

La calidad musical de Gatica también encantó a estrellas como Frank Sinatra o Julio Iglesias, al que se refería como su amigo personal.

"Mi queridísimo compadre: Que tiempos felices! Todo pasa y todo queda. Y tú, como siempre, lo dejas todo: tu cariño, tu amistad, tu generosidad", escribió Iglesias en un mensaje en redes sociales tras su fallecimiento.

Su fama trascendió generaciones y artistas como el mexicano Luis Miguel, que grabó los boleros que Gatica interpretaba.

En 2007, recibió el Grammy Latino a la Excelencia.

Gatica se casó tres veces y tuvo siete hijos. Uno de ellos, Luis, es un reconocido cantante y actor en México.

En Chile, donde las autoridades declararon un día de luto oficial, obtuvo la Orden al Mérito Gabriela Mistral y la Sociedad Chilena del Derecho de Autor (SCD) lo nombró Figura Fundamental de la música en 2007.