La reina de la telerrealidad estadounidense Kim Kardashian y su esposo, el rapero Kanye West, anunciaron ayer martes el nacimiento de su tercer hijo, una niña cuyo nombre no fue difundido, a través de una gestación subrogada.

“¡Ella está aquí! Estamos tan enamorados”, se lee en letras negras sobre un delicado fondo rosa pálido el anuncio de Kim Kardashian en Twitter, enviado a sus 58,3 millones de seguidores este martes.

Un breve comunicado señala que la niña, “saludable y hermosa”, nació el 15 de enero a medianoche y pesó 3,3 kilos (7,6 libras).

“Estamos increíblemente agradecidos a nuestra madre de alquiler que tornó nuestros sueños realidad con el mayor regalo que uno puede hacer, y a nuestros increíbles médicos y enfermeros por sus cuidados especiales”, sostuvo Kardashian, de 37 años, que también posee 106 millones de seguidores en Instagram.

“North y Saint están especialmente entusiasmados de dar la bienvenida a su pequeña hermana”, añadió.

Kardashian y West se casaron en mayo de 2014 y ya tenían dos hijos: una niña, North, de cuatro años y un varón de dos años, Saint.

El sitio de celebridades TMZ había indicado que la pareja optó por alquilar un vientre debido a que Kardashian sufre de placenta accreta, que le generó problemas durante su segundo embarazo y podría poner su vida en riesgo con otra gestación.

Según TMZ, los West pagaron 45.000 dólares a la madre sustituta, que tenía prohibido fumar, tomar y consumir drogas, así como tomar baños calientes, pintarse el cabello y comer pescado crudo.