Carlos Ernesto Abarca Santos celebró el final del 2021 con su familia, las risas y los abrazos fueron la despedida de un año difícil, el joven de 22 años esperaba con ilusión elaño nuevo para cumplir su meta de estudiar idiomas en una academia; sin embargo, la mañana del primer día del 2022 desapareció y su familiares y conocidos no saben de su paradero desde entonces.




El salió a correr desde las 8:00 am, yo le había dicho que ya no saliera porque es usual que para estas fechas algún loco en estado de ebriedad salga y le haga algo a los bichos, pero bueno uno ya por la edad anda cansado y me quedé dormido y él se fue y desde ese día ya no sé nada de él”. Ricardo Santos, padre de Carlos.



Según explicó Ricardo, su hijo acostumbraba a salir a correr por las mañanas, y salió de la colonia Montserrat en dirección al estadio Cuscatlán, en San Salvador, donde era conocido por los que llegan a hacer ejercicio al lugar.


Carlos además recibía clases en línea para aprender idiomas, este año quería ir a una academia para mejorar su inglés.


“A él le gustan los deportes, pero le gustaba sobre todo lo de los idiomas, incluso él quería estar este año en la Academia para mejorar su ingles” explicó Santos. Carlos es el primero de los 3 hijos de la familia Santos.


El padre de Carlos puso la denuncia en la Policía Nacional Civil el mismo 1 de enero, cuando el joven no regresó a su casa.

En tratamiento


Santos dijo que su hijo desde que era niño padecía un trastorno mental, diagnosticado como bipolaridad aguda.


“Mi hijo está en un tratamiento médico porque él está diagnosticado con trastorno mental, bipolaridad aguda es el término que me dijeron los médicos, él desde niño está así, pero ya estos últimos años ya estaba normal” dijo.


El joven había empeorado su salud con la llegada de la pandemia; sin embargo, este último año parecía haber superado su enfermedad, esto porque salía a correr para “distraerse” de su trastorno.



La sospecha


Según conocidos de Carlos, él había tenido problemas con unos apostadores “ilegales”, a quienes Carlos había señalado, y a quienes no recomendaba comprar boletos de lotería.


“Él llevaba días un poco enojado y él miraba que por la colonia había personas que hacen como lotería ilegal y él no le parecía eso y les decía a los de la colonia o cualquiera que, ya no les compraran que eso era ilegal, me imagino que por ahí puede ir”, dijo Santos quien entre lágrimas pide a respuesta del paradero de su hijo.


Cualquier información sobre el paradero de Carlos será bien recibida al teléfono 7992-7918.