Esta semana se pudo notar una mejoría en comparación con el año anterior, las personas que realizan turismo interno han abonado a la economía de muchas familias que se sostienen por los comercios turísticos de las diferentes zonas costeras del país.

El covid-19 ha sido un golpe bajo para muchos negocios, los restaurantes y atractivos turísticos tratan de salir adelante e implementan las medidas necesarias para su buen funcionamiento.

Todos los restaurantes brindan en la medida de lo posible los protocolos de bioseguridad como la toma de temperatura, el uso de alcohol gel, la rutina de limpieza en las mesas y la portación de mascarillas de su personal, pero esto también les genera un aumento en su presupuesto y las ventas y las visitas de turistas varían durante la época normal. “Gracias a Dios hemos podido recibir a muchas familias para brindar nuestro servicio de comida, no es lo que esperábamos, pero somos optimistas que poco a poco la situación irá mejorando y podamos regresar a la normalidad de una forma más responsable” comentó Luis Bolaños de Restaurante Juanita en el Puerto de La Libertad.

El representante del comercio afirma que el espacio es importante y el distanciamiento que toma una mesa de otra hace que se tenga menos capacidad para recibir a más clientes, sin embargo, agregó, es más importante seguir las normas y brindar calidad en el servicio.