Dos presuntos homicidas de 11 personas, en el cantón Agua Escondida, de San Juan Opico, fueron capturados por las Fuerzas Especializadas de Reacción de El Salvador (FES).
El primer sospechoso es Miguel Ángel Deras Martínez, de 22 años, alias “Slipi”, de la pandilla 18 Revolucionarios, quien fue detenido el pasado martes en la casa No. 6 del pasaje 2 de la lotificación Antonieta, de Quezaltepeque, La Libertad, según la información policial y militar.
La Fuerza conjunta de policías y soldados lo detuvieron aproximadamente a las 12:00 del mediodía, en el interior del inmueble, dando cumplimiento a una orden administrativa emitida por la Fiscalía General de la República, de acuerdo al informe.
Durante el procedimiento le incautaron una arma de fuego, al parecer un revólver calibre 38 milímetros.
Según la FES, el marero está perfilado como uno de los involucrados en la masacre de Opico.
Un segundo sospechoso identificado como Juan Leonardo Flamenco Flores, alias “Inquieto”, fue capturado ayer en ese mismo municipio, según un informe de la Fuerza Armada. Ambos serían acusados de varios delitos, incluido homicidio agravado. Hasta ayer el ministerio público, no había emitido un reporte sobre las detenciones.
Habría más capturas
Tras la masacre del pasado 3 de marzo, las autoridades hicieron numerosas detenciones de sospechosos. Pero luego fueron liberados tras no haber supuestas evidencias de su participación en el masivo crimen. Desde ese momento, las autoridades policiales y fiscales manejaron las investigaciones con total hermetismo.
Tres lugareños y ocho trabajadores fueron privados de libertad cuando instalaban postes del tendido eléctrico en el caserío Las Flores. Luego fueron trasladados a un predio, cerca de un camino vecinal, donde fueron masacrados.
