La violencia, el hambre y desempleo están detrás de las caravanas de centroamericanos que buscan ingresar a Estados Unidos, indicó ayer el cardenal Rosa Chávez durante su homilía en conmemoración del Día de los Santos Inocentes, en la cual destacó que así hay “pueblos vivos” hay “muertos”.
Este viernes, la comunidad católica celebró diferentes actos en honor al Día de los Inocentes, que, según la creencia cristiana, conmemora la masacre de los niños en Belén por orden del rey Herodes I y fue previo al nacimiento del niño Jesús.
“Hemos visto esos inocentes caminando hacia el norte en las caravanas que de repente surgieron como fenómeno inesperado. ¿Por qué la gente se va de El Salvador, Honduras y Guatemala?”, cuestionó el cardenal Chávez en una misa desarrollada en el parque de Antiguo Cuscatlán. Al instante agregó: “Detrás está la violencia, el hambre y desempleo, buscaron un horizonte mejor para los niños y jóvenes, y esa experiencia nos ha abierto a muchos los ojos sobre el país que tenemos”.
Este comentario surgió horas después que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, indicó que los países del Triángulo Norte son “aprovechados” de su nación pues “toman nuestro dinero”, pero no hacen nada por su nación y ni previenen las caravanas de migrantes.
Mientras tanto, para el líder religioso en El Salvador hay tres momentos para conmemorar esta fecha. La primera, agregó, radica en las razones bíblicas, seguido del momento de los no nacidos y los niños víctimas de la masacre de El Mozote, cometida los días 10, 11 y 12 de diciembre de 1981 en El Mozote, La Joya y Los Toriles, de Morazán.
“Hemos visto cómo se devuelven restos de esos niños (de El Mozote) a sus familiares. ¿Por qué pasó eso? y ¿por qué el mundo lo ignoró? La historia que hemos vivido no queremos que se repita”, dijo.
Con la misa concluyó la jornada de las fiestas patronales de Antiguo Cuscatlán dedicadas a los Santos Niños Inocentes. Al encuentro acuden feligreses como Sonia Mercedes Hueso, de Mejicanos, quien asistió para agradecer por las enseñanzas de su madre en su juventud y por la canonización de Romero.
Rosario relató entre lágrimas que pidió por su nieta Sofía Nicole, nacida prematuramente el 13 de diciembre. “A pesar de tantas cosas que pasan en este mundo, hay que pedir por los niños”, indicó.