Las autoridades de Salud del país y representantes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) expusieron ayer en un primer foro las implicaciones del virus zika y su posible relación con enfermedades neurológicas y malformaciones congénitas. El problema generó alarma desde que Brasil comenzó a reportar un inusual aumento de casos de microcefalia en recién nacidos y de personas con Guillain-Barré que podrían ser provocados por el zika.

En el foro, Evelyn de Calderón, ginecobstetra del ISSS, indicó que la microcefalia y las malformaciones congénitas también pueden darse por otras causas. Indicó que los niños con microcefalia pueden morir dependiendo de la severidad del síndrome. Pero en caso de sobrevivir, no caminan ni hablan. Dijo que a esos niños, se les refiere al Instituto Salvadoreño de Rehabilitación Integral (ISRI). Las personas que sufren Guillain-Barré, el 20 % puede quedar con secuelas a largo plazo.

En El Salvador, según el viceministro de servicios de salud, Julio Robles Ticas, de más de 25 mujeres que dieron a luz en las últimas semanas y que tuvieron zika, sus bebés no han presentado ninguna malformación; sin embargo, el problema podría darse en quienes padecieron el virus en su primer trimestre de embarazo. De esos casos, hay un promedio de 35 a 40 mujeres, pero Robles Ticas dijo que los bebés se desarrollan con normalidad de acuerdo al seguimiento de ultrasonografías.

En el caso de Guillain-Barré, indicó que pese a que en diciembre se tuvo un aumento inesperado, se ha visto una disminución en las últimas semanas, y hasta el 9 de febrero tienen 118 casos.

Por su parte, el Ministerio de Turismo anunció ayer la implementación de un plan de acción para proteger a los turistas del zika, con la certificación de las instalaciones turísticas más frecuentadas por los visitantes.