Familiares y amigos de los 17 militares involucrados en la masacre de los jesuitas de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) en 1989, calificaron de injerencia la extradición solicitada por el juez Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional de España.
En señal de protesta los manifestantes marcharon a la sede diplomática de ese país, donde entregaron una carta dirigida a dicha instancia judicial, así como al monarca de ese país europeo, mediante la cual piden respeto a la soberanía de El Salvador.
“Nosotros orgullosamente estamos marchando por nuestros padres, por mi patria y por nuestros derechos. El Salvador ya decidió, El Salvador quiere paz”, exclamó Juan Orlando Zepeda, quien lleva el mismo nombre de su padre, actualmente en proceso de extradición.
La misiva fue firmada por familiares de todos los militares reclamados por España, según aseguró Carlos Mauricio Segovia, pariente de uno de los vinculados en la ejecución de los sacerdotes jesuitas.
“La Audiencia Nacional Española no es una corte internacional de justicia, para abrogarse una jurisdicción que no tiene, es un asunto meramente interno de nuestro país” dijo Segovia, que pidió cerrar el capítulo del conflicto que dejó más de 75 mil muertos entre 1981 y 1992.
[caption id="attachment_629085" align="alignright" width="300"] La protesta frente a la Embajada de España duró unos 40 minutos, sin reportarse incidentes.[/caption]
Los manifestantes marcharon desde el monumento a la Revolución, en la colonia San Benito y se dirigieron a la Embajada de España, sobre la calle Reforma, donde un pelotón de policías antimotines les impidió el paso. Con vivas a la Fuerza Armada, portando banderas de El Salvador y vestidos con camisetas blancas, marcharon por varias calles, hasta llegar a la embajada, donde cantaron el Himno Nacional.
“Por qué estamos acá: Primero, que dejen a nuestros padres libres y que no los sigan persiguiendo... Es triste ver que nuestras propias instituciones no respetan nuestras leyes. Segundo, que la Corte Suprema de Justicia, tanto la Sala de lo Constitucional, como la Corte en Pleno, hagan valer las sentencias que ellos mismos dictaron en el año 2011 y 2012”, reclamó Ana Virginia Bustillo, hija del general Juan Rafael Bustillo, uno de los militares implicados.
La protesta fue organizada por las familias de los detenidos con el apoyo de militares de baja, que ocuparon importantes cargos públicos en las administraciones areneras, como el general Otto Romero.
Romero reclamó que se dejen en paz a sus compañeros de armas. Dijo que se trata de una injerencia y que se está violentando la constitucionalidad del país.
“Al Gobierno y pueblo español le pedimos como pueblo salvadoreño el respeto a nuestra soberanía, a nuestras instituciones, creemos que éste es un irrespeto del juez Eloy Velasco al entrometerse en asuntos meramente internos”, expresó Segovia.
Después de unos 40 minutos de concentración, hombres y mujeres se retiraron pacíficamente.
SOLICITUD DE EXTRADICIÓN
El pasado 6 de febrero fueron detenidos cuatro militares de los 17 sobre los cuales pesan órdenes de captura internacional por el crimen de cinco jesuitas de origen español. Los detenidos son: Ramiro Ávalos Vargas, Tomás Zárpate Castillo, Guillermo Alfredo Benavides Moreno y Ángel Pérez Vasquez; el resto se mantienen prófugos.
Desde España ya fue enviada la solicitud de extradición de los detenidos, y se espera que la Corte Suprema de Justicia reciba la misma para decir si se procede o no con la petición.
4 Militares
Han sido detenidos y el resto se mantienen prófugos