La Organización Panamericana de la Salud (OPS) promueve un plan de acción para la salud mental durante cinco años (2015-2020) con el fin de obtener bienestar mental y prevenir los trastornos mentales.
A su vez ofrece atención y ha intensificado la rehabilitación, recuperación y promoción de Derechos Humanos de las personas con trastorno mental.
La primer línea de acción que promueve es el liderazgo y gobernanza para que en los países de América se promuevan políticas y planes, y se diseñen leyes de salud mental.
También para que se incremente la cobertura de servicios de salud mental de tipo ambulatorio y se reduzca el papel de los hospitales psiquiátricos “las personas que sufren una enfermedad mental tienen derecho a vivir y trabajar en la comunidad”, dice la OPS. Además, busca que se integre este componente de salud mental desde la atención primaria y se implementen programas de prevención del suicidio.
Finalmente busca que los sistemas de información estén fortalecidos y que se integren en un conjunto de indicadores de salud mental que sean notificados cada año.
La OPS pide que al llevar a la práctica la atención en salud mental se tome en cuenta los temas de salud ambiental, biológica, socioeconómica, cultura relacionados con el sistema de salud; también el género, desigualdad, condiciones de vida, etnia, creencias, religión y diversidad lingüística.