Un sismo de 5.1 grados alertó a la población el pasado 10 de abril, durante el primer episodio del enjambre. Foto: DEM


La alerta amarilla se declara cuando una amenaza se encuentra en desarrollo y la probabilidad de afectación está en un 50% aumentada. El reglamento de Protección Civil indica que al activar esta alerta deberán activarse los Centros de Operaciones de Emergencia (COE) “para darle una mayor cobertura de coordinación, conducción y atención a cualquier suceso que pueda intensificarse”.

Esta alerta es la etapa de preparación ante una amenaza natural en donde la fase de peligro es moderado y lo mejor es seguir las recomendaciones de las autoridades:

1. Mantener la calma para poder actuar.

2. Identifique los sitios seguros en casa o en el trabajo.

3. Esté preparado ante una posible evacuación.

Esta misma alerta indica que las autoridades podrán enviar los recursos humanos necesarios para hacer búsqueda o rescates, así como los preparativos contemplados en un plan de emergencia.

La Dirección General de Protección Civil activó la alerta amarilla el pasado 10 de abril, luego de un sismo de 5.1 grados que provocó una persona fallecida y considerables daños en viviendas e instituciones.