El metro de Milán luce con muy poca gente durante la cuarentena. / AFP


Al médico salvadoreño Carlos Andrés Papini le han tocado días duros en Milán, la capital económica de Italia y una de las ciudades del mundo considerada “zona roja” del coronavirus.

Después de tres años en Italia, Papini jamás imaginó lo que está sucediendo. Italia entera, una nación de 60 millones de habitantes -más que toda Centroamérica junta- se ha puesto en cuarentena ante los más de 10 mil enfermos y al menos 631 muertos por el llamado Covid-19 que apareció en Wuhan, China, a inicios de año y ahora se ha expandido por más de 100 países.

“Se ha puesto difícil la situación. Muchos colegas enfermos, pacientes siempre delicados... ayer declararon zona roja a toda Italia, pero la situación sigue y seguirá delicada acá en la Lombardía”, dice Papini.

Lombardía es la región de la que Milán es su ciudad principal. Ahí se habían diagnosticado hasta ayer 5,791 de los 10 mil casos del país.

Italia es ahora el segundo país más afectado por el Covid-19 y ayer se conocieron168 nuevos fallecimientos, un récord en 24 horas.

Papini relató que han abierto nuevas camas para cuidados intensivos pero… “la gente se sigue infectando”.

El salvadoreño asegura que le han tocado “dobles turnos, con mucho flujo de pacientes... muchísimos”.

“Vienen muchísimos pacientes, y la mayoría pacientes ancianos, delicados, pluripatológicos (con diversos padecimientos) y pocas camas en intensivo”, comenta.

Papini dice que el flujo de pacientes es tan alto que las autoridades sanitarias han tenido que volver a abrir un antiguo hospital militar para tratar a algunos pacientes con Covid-19.

“Creo que la única buena noticia acá en Italia, es que el paciente “cero”, que estuvo entubado en intensivo, ayer empezó a respirar autónomamente y pasó a encamamiento normal. Es un paciente joven de 38 años”, explica el médico. salvadoreño.

 

Parte de la zona turística de Milán, totalmente desolada. / AFP