El origen de esta expresión es que mientras el barbero estaba cortando la barba a otro cliente, él preparaba la barba del siguiente remojándola con agua caliente para cuando terminara con el primer cliente. Entonces, cuando vemos afeitar la barba del vecino, sabemos que los siguientes vamos a ser nosotros, por lo que debemos de prepararnos para cuando nos toque el turno.

Yo no creo en las encuestas, pero, si se observan los resultados que presentan, ante un tema o problema dado, no solamente una sino que si se constata que la mayoría, provenientes de diferentes fuentes reconocidas y con credibilidad, presentan datos parecidos, entonces hay que poner las barbas en remojo.

Si comparamos los datos que presentan diferentes encuestas, sobre un mismo tema-problema, podría considerarse que estamos haciendo un ejercicio de “triangulación”. Esta técnica se utiliza en investigación, aunque no siempre, para analizar la confiabilidad de los resultados obtenidos.

En El Salvador, en general, no se utiliza. También hay otras cuestiones que no se responden, por ejemplo: no se registra lo que es información, opinión y actitud del entrevistado. En nuestro medio hablamos de “percepción” y allí englobamos todo. Por ejemplo: ¿qué sabemos del candidato? (información). ¿Qué opinión de él tenemos a partir de esa información disponible? (opinión). ¿La actitud hacia ese candidato? En este punto el entrevistado tiene una opinión positiva, pero no tener la actitud de votar por él.

El principio básico subyacente en la idea de triangulación es el de recoger observaciones/apreciaciones de una situación (o algún aspecto de ella) desde una variedad de ángulos o perspectivas y después compararlas contrastarlas” (Elliot, 1980).

En los estudios de corte cualitativo, como son los estudios de opinión, esta interpretación es más compleja, debido a que la metodología, el tipo de información y los tipos de pregunta de investigación que éstos responden difieren en su naturaleza, y aspectos como la validez externa e interna, por lo que adquieren otros significados. En estos estudios, se han diseñado y utilizado algunas herramientas que aumentan su validez y calidad, entre las cuales encontramos la triangulación. (Benavides; Restrepo, 2005).

Veamos:

Los sondeos de opinión publicados por diferentes universidades y encuestadoras reconocidas dan un amplio margen a favor de Nayib Bukele sobre los demás candidatos presidenciales en contienda.

Encuestas publicadas el pasado mes de diciembre: Universidad “José Simeón Cañas” (UCA) 59 %; Universidad de El Salvador (UES) 64 %;  Utec 40.5 %.

En las de este mes de enero: Mitofsky 57 %; CID Gallup 57 %; TResearch 58 %; UFG 57.95 %; Conares (Consejo Nacional de Rectores) 61 %; Utec 58.1 %

Ante esta realidad, en la que se observa mucha coincidencia de los datos en cuanto a quien en el momento de la entrevista, es el preferido por la población. Hasta ahora no se sabe que se haya hecho al menos un ensayo de triangulación de estos resultados, a fin de conocer su confiabilidad. Lo que se ha hecho es ignorarlas o restarles importancia, presentando otras, no muy confiables, en las que se busca colocar a otros en el rango de las preferencias electorales en la votación presidencial de este próximo domingo 3 de febrero. Con esta operación psicológica se pretende levantar el ánimo supuestamente caído de su gente o promover el voto a favor de sus  candidatos. Sin embargo, hay que dejar constancia que las encuestas no permiten a un académico o investigador calificado, llegar a conclusiones, por ejemplo: es seguro que el que va en primer lugar es el que va a ganar. Estos sondeos reflejan solamente la representación de un instante, que podría reflejar incluso un estado de ánimo, que tal vez cambiaría, por ejemplo al momento de ejercer el sufragio.

Se realizará desde el pacto de cese de fuego de 1992, la sexta elección presidencial. Los sondeos de opinión reconocidos, dan como posible ganador a Nayib Bukele del partido GANA, quien, como tercera fuerza, desafía de entrada con liquidar la polarización existente que ha imperado en el país desde el final de la guerra. Hoy por hoy, el turno es Maduro, pero mañana podría ser Evo, Ortega, AMLO,..…