Sánchez Cerén anunció en su mensaje que en ese momento el canciller salvadoreño Carlos Castaneda, el primer designado presidencial y secretario general del FMLN, Medardo González, y el secretario de asuntos legislativos y jurídicos de la Presidencia, Rubén Alvarado, estaban en misión oficial para anunciar la firma de un comunicado conjunto sobre el establecimiento de las relaciones diplomáticas con la República Popular China. “Este es un paso a la dirección correcta, permitirá grandes beneficios para el país y brindará oportunidades a nivel personal a cada uno de ustedes”, afirmó Sánchez.
El Salvador y China instalarán inmediatamente un mecanismo de diálogo entre representantes de ambos países para “identificar potencialidades” en comercio, inversión, cooperación, turismo, apoyo a la micro y mediana empresa, afirmó el Presidente. Los estudiantes becarios que se encuentran en Taiwán serán trasladados a China. “Asegurando sus oportunidades de estudio en universidades de primera calidad”, prometió Sánchez.
La decisión recibió ayer críticas. La embajadora de los Estados Unidos, Jean Manes, anunció que esto “impactará” la relación de Estados Unidos con el gobierno de El Salvador.
El senador estadounidense Marco Rubio, cree que posiblemente China ayude al FMLN a ganar las elecciones, pero previó un “daño real” a la relación con Estados Unidos, advirtiendo que trabajará para eliminar a El Salvador del plan “Alianza para la Prosperidad” y “poner fin a su financiación”.
También Ileana Ros-Lehtinen, representante de La Florida en el Congreso, lamentó la decisión y sugirió “zanahora y palo” para “detener la influencia maligna de Beijing”.
Lo tildan de traición
El presidente de la Asamblea Legislativa, Norman Quijano, tildó el rompimiento de relaciones con Taiwan como una traición a un país amigo. “Lamentamos, condenamos esta actitud de un gobierno impopular como el de Sánchez Cerén”, afirmó en Twitter.
Quijano anunció que buscarán un pronunciamiento y una “disculpa al pueblo taiwanés” por esa actitud “tan nefasta”. “China Taiwán es una nación que ha sido muy solidaria con nosotros”, agregó.
Ernesto Muyshondt, alcalde de San Salvador, del partido ARENA, lo tildó de una pésima, vergonzosa y nefasta decisión de política exterior. Guillermo Gallegos (GANA) lamentó la decisión. “Somos mal agradecidos como país”, expresó.
China y Taiwán están dirigidas por regímenes rivales desde el final de la guerra civil en 1949. La isla goza de un gobierno autónomo, pero jamás declaró su independencia.