El candidato presidencial demócrata estadounidense, Joe Biden ofrece a los países del Triángulo Norte de Centroamérica -El Salvador, Guatemala y Honduras- un plan de apoyo integral de $4 mil millones y un fuerte combate contra la corrupción endémica que afecta la región.
"El plan de Biden para fortalecer la seguridad y prosperidad en colaboración con los pueblos de Centroamérica", publicado en la página web del candidato presidencial demócrata, favorito en las encuestas sobre el presidente Donald Trump, enumera así sus principales objetivos en la región:
- Desarrollar una estrategia regional integral de cuatro años y $4 mil millones para abordar los factores que impulsan la migración desde Centroamérica;
- Movilizar la inversión privada en la región;
- Mejorar la seguridad y el estado de derecho;
- Abordar la corrupción endémica;
- Priorizar la reducción de la pobreza y el desarrollo económico.
La propuesta sostiene que "la gente de la región comprende que abordar estos desafíos de manera sostenible exige cambios sistémicos y reformas en muchos sectores de la sociedad en el Triángulo Norte, y ese tipo de cambio requiere una inversión seria de voluntad y recursos políticos en todos los niveles".
"Requiere el compromiso sostenido de los líderes y pueblos de El Salvador, Guatemala y Honduras, y a medida que avanzan, los Estados Unidos deben estar allí para ofrecer apoyo y colaboración. Es de claro interés para los Estados Unidos ayudar a impulsar ese cambio con una estrategia integral de apoyo de los EE.UU. para iniciativas regionales y el compromiso a los niveles más altos de nuestro gobierno", advierte.
El plan de $4 mil millones
Según el plan, Biden ofrece una estrategia regional integrada de cuatro años y $4 mil millones que:
- Requiera que los países asignen una cantidad sustancial de sus propios recursos y emprendan reformas significativas, concretas y verificables;
- Establezca condiciones sólidas para un progreso verificable con el fin de garantizar que los fondos de los contribuyentes estadounidenses se utilicen de manera efectiva;
- Ponga la lucha contra la corrupción en el centro de la política de los Estados Unidos en América Central;
- Dirija la inversión del sector privado, incluyendo a través de alianzas público-privadas, para complementar los fondos del gobierno;
- Invierta principalmente en organizaciones de la sociedad civil que están en la primera línea al lidiar con las causas fundamentales;
- Renueve los esfuerzos para trabajar de manera constructiva con México, Canadá y otros socios regionales de América Central y del Sur; y
- Reconozca el papel central de las mujeres como una fuerza poderosa para el desarrollo.
Una Administración Biden promovería la estabilidad económica y la creación de empleos en América Central al trabajar con bancos multilaterales de desarrollo, como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para desarrollar infraestructura y promover la inversión extranjera al involucrarse con el sector privado de manera rentable y competitiva. Además, buscarán reducir las barreras a la inversión del sector privado al dar prioridad al fortalecimiento del estado de derecho con una mayor capacidad judicial, y mejorar la competitividad del mercado del Triángulo Norte mediante la modernización y estandarización de los procedimientos de aduana.
También ordenará al Representante Comercial de los EE.UU. y al Departamento de Comercio que evalúen si los países de Centroamérica cumplen con sus compromisos bajo el DR-CAFTA, lo que incluye garantizar que las prácticas laborales no perjudiquen la competencia.
Como presidente, Biden creará mecanismos para ayudar a los receptores de remesas, especialmente a las mujeres, a invertir y comenzar pequeños negocios".
Además, ofrece centrar los esfuerzos de desarrollo económico en la modernización de las redes eléctricas, puertos y carreteras del Triángulo Norte, para que las industrias locales puedan competir a nivel mundial. A corto plazo, Biden unirá esfuerzos para duplicar la capacidad de SIEPAC, el Sistema Centroamericano de Interconexión Eléctrica, para generar electricidad para la región.
Lidiar con la corrupción endémica
Uno de los puntos más fuertes en el plan Biden es el combate a la corrupción endémica que afecta a la región y que sostiene "impide que las naciones gobiernen de manera efectiva, desvía los recursos necesarios para inversiones críticas en áreas como infraestructura y educación, aleja la inversión externa, crea una crisis de legitimidad en las democracias frágiles y deja a los países vulnerables al crimen organizado".
Es un cáncer que está carcomiendo a los países del Triángulo Norte y les impide progresar significativamente en cualquiera de sus otros desafíos clave. Como la administración más corrupta en la historia moderna de los Estados Unidos, Trump ha socavado el liderazgo moral de los Estados Unidos en este tema, y sus esfuerzos para combatir la corrupción en cualquier parte del mundo han sido lamentablemente inadecuados o inexistentes". Plan Biden.
Entre las prioridades para combatir la corrupción en el Triángulo Norte, Biden plantea:
- Revocar las visas a los Estados Unidos y congelar los activos de personas corruptas de El Salvador, Guatemala y Honduras.
- Aumentar la presencia de los agregados de los Departamentos de Justicia y Tesoro de los EE.UU. en nuestras embajadas en Centroamérica con el fin de combatir mejor el crimen organizado y la actividad ilícita, y crear una nueva oficina como parte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro para investigar la corrupción en el Triángulo Norte.
- Priorizar fondos adicionales para capacitar a fiscales en políticas y procedimientos anticorrupción especializados.
- Apoyar los mecanismos anticorrupción existentes mientras se trabaja con aliados para crear una comisión regional, con el fin de combatir la corrupción, construir instituciones nacionales más sólidas y ayudar a los fiscales locales a perseguir la corrupción. Para garantizar la sostenibilidad y el éxito a largo plazo, Biden también contará con el apoyo de organizaciones internacionales, como las Naciones Unidas, la Organización de los Estados Americanos y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, que ya tienen en marcha esfuerzos contra la corrupción.
Seguridad
Otro tema que menciona el plan Biden es el de seguridad regional que incluye apoyar reformas a nivel nacional para combatir la corrupción en los servicios de seguridad y fortalecer el poder judicial. Invertir en mejorar los estándares profesionales y la capacitación de la policía y las fuerzas de seguridad en la región es clave para garantizar que se priorice la seguridad pública, en colaboración con las comunidades.
Además, Respaldar los programas de reducción de la violencia y los programas de capacitación laboral que evitan que los jóvenes se unan a pandillas criminales peligrosas en primer lugar. Estos esfuerzos se basarán en las prácticas más recientes basadas en la evidencia en todo el mundo para reducir la violencia, con programas fundamentados en datos dirigidos a delincuentes de alto riesgo, mediante la interrupción de la violencia; terapia cognitiva, conductual y familiar; reforma de la justicia juvenil; la justicia restaurativa; y desarrollo de la fuerza laboral.
También Brindar asistencia técnica a jueces y fiscales con el fin de ayudar a las autoridades a combatir con mayor eficacia los delitos financieros. Y garantizar el acceso a la justicia y servicios de apoyo para víctimas de violencia doméstica.
Biden restablecerá el acceso completo al asilo para las víctimas de violencia doméstica, al tiempo que fortalecerá las capacidades de los fiscales para llevar adelante los casos de violencia doméstica y poner a los perpetradores tras las rejas.
Migración
El plan Biden también ofrece eliminar de inmediato las políticas de inmigración draconianas de la Administración Trump.
"Como presidente, Biden eliminará de inmediato las políticas de inmigración draconianas de la Administración Trump y galvanizará la acción internacional para abordar la pobreza y la inseguridad que llevan a los migrantes del Triángulo Norte a los Estados Unidos", dice el plan.
"Actualmente, el Triángulo Norte enfrenta enormes desafíos a causa de la violencia, las organizaciones criminales transnacionales, la pobreza y las instituciones públicas corruptas e ineficaces. Esto está obligando a demasiadas familias, niños no acompañados y adultos a tomar una decisión insostenible: dejar todo lo que conocen y emprender un viaje peligroso para buscar una vida mejor, o quedarse y vivir bajo la amenaza constante de violencia, persecución, desesperanza o incluso la muerte", señala el documento.
"La respuesta de Trump ha sido promulgar políticas de inmigración draconianas que buscan anular nuestras leyes de asilo y refugiados, junto con reducciones severas en nuestra asistencia extranjera a la región. Trump no logró lidiar con el desafío de la migración irregular y abandonó nuestro compromiso con los derechos humanos y nuestros valores democráticos en el proceso. Y, vemos los resultados de sus decisiones peligrosas y erráticas todos los días en la crisis humanitaria en nuestra frontera", agrega.