Roberto Rubio, director de Funde


El director de la Fundación para el Desarrollo Nacional (Funde), Roberto Rubio, sugiere buscar impuestos que no perjudiquen el dinamismo económico, así como recortar plazas fantasmas y algunos gastos en el Estado. Rubio asegura que hay señales de autoritarismo en el Gobierno, pero cree que las instituciones que funcionan no han permitido que éste avance. Advierte a la sociedad estar vigilante hacia las elecciones de funcionarios que vienen en los próximos años: en el Instituto de Acceso a la Información Pública, Corte de Cuentas, Tribunal de Ética Gubernamental, Sala de lo Constitucional y Fiscalía General de la República.



Se está dando un nuevo intento de solucionar los problemas fiscales del país. ¿Cómo ve el ambiente político?

El ambiente sigue estancado. No hay nada extraordinario en el ambiente que diga que estamos avanzando, a menos que hubiera cosas bajo de agua, lo que vemos en el diálogo mediático. El ambiente se ha ido enrareciendo, crispando bastante. Los temas como la aprobación del presupuesto sin ARENA, el espionaje, los ataques que ha habido antes a aquellos que se oponen al Gobierno, aunque hay que decir que los ataques a la Sala (de lo Constitucional) han bajado, todo eso vino a enrarecer el ambiente de diálogo. Todo eso ha resultado en un estancamiento del proceso. Pero en la medida que la situación se vuelve más grave, posiblemente, las personas de uno y otro lado que son como kamikazes, que dicen ‘No les prestemos nada’ o los otros que dicen ‘Caigamos en impago para que el modelo caiga y echémosle la culpa a la oposición’, esas posiciones puedan no aflorar en una situación extrema y que prive más la sensatez que hay que encontrarle una salida. Se está hablando de un pacto de nación pero ni siquiera estamos de acuerdo en una cosa elemental pero decisiva como el tema fiscal. Estamos por la premura de la crisis, pero ni en eso nos hemos podido entender.



Usted dice que hay kamikazes. ¿Qué intereses los mueven?

Del lado de las voces oficiales, hay sectores que se les ha escuchado decir: ‘Bueno, y si esta situación de impago lleva a una desdolarización, nos liberamos del gran demonio’. También son posiciones suicidas el decir ‘Que caiga en impago y que todos estos grupos empresariales, el funcionamiento del modelo, queda en cuestionamiento y sobre las cenizas reconstruimos porque éste es un modelo que hay que destruir’. Son pensamientos bastante suicidas. Sea que la economía se dolarice o sea que caigamos en una situación de crisis económica, siempre el principal responsable va a ser el Gobierno. Una crisis inflacionaria o desorden monetario producto de la desdolarización, el principal responsable es el que está gobernando en el momento y no es fácil echarle la culpa a la oposición. Por el lado de la oposición, hay personas que dicen ‘No es cierto que el Gobierno está tan mal, ocupan el miedo con el impago para forzarnos’. Las posiciones de ‘El Gobierno va a caer en impago por lo tanto, se van a ver obligados a reducir los gastos, no les demos nada’; esta posición pudo haber tomado más fuerza en la medida en que ARENA aprobó $550 millones y estos sectores les dicen ‘No les cumplieron’. Las posiciones de estos sectores se han fortalecido internamente; las voces sensatas, que son las que deberían haber en uno y otro lado, todavía no aparecen con fuerza. Yo confío en que la situación se tense tanto y lleguemos al borde de una situación difícil que, en ese momento, la sensatez surja. Un amigo me ponía el ejemplo de una película, un juego, se iban de frente a chocar, el que se apartaba perdía; a veces da la impresión que están en ese juego.



¿Con interés electoral o ideológico?

Está jugando mucho más el aspecto electorero que el ideológico. Sí hay aspectos ideológicos como esto del dólar, el demonio, el esquema neoliberal, etcétera, pero es la parte electoral, porque usted tiene muchas soluciones técnicas, pero en la medida en que una solución técnica, un ajuste técnico, porque está claro que va a haber que hacer ajustes, casi la mayoría de éstos, unos más otros menos, son dolorosas y tiene un impacto en la población. Subsidios, tiene un impacto electoral en un núcleo de la población, subir el IVA tiene un impacto fuerte en la población. Estas son medidas que técnicamente son viables, sí, bajar subsidios y subir dos puntos el IVA. A los que dicen que el IVA puede ser regresivo, bueno, usted lo puede hacer menos regresivo si con eso que recauda corrige por redistribución esos efectos, pero el problema no es técnico, es político, en la medida que se van acercando las elecciones los ajustes dolorosos son más difíciles de enfrentar. Como Funde tenemos propuestas, donde, para aquellos que dicen que no hay que tocar impuestos porque va a deprimir la economía, tenemos propuesta donde creemos que se puede aumentar los impuestos sin caer en algo que deprima más la economía, impuestos que no son recesivos. Le pongo tres ejemplos. El incorporar más sectores informales pero estimulando, no es recesivo. El check off, impuesto a la importación nacional de ciertos bienes de consumo masivo, con lo que recoge usted estimula la producción nacional de ese bien, no es recesivo, usted crea un fondo para que los productores se vean estimulados, eso puede ser ropa, zapatos. El otro impuesto es a la plusvalía, a la valorización de terrenos por parte de una obra pública. Hay salidas por la vía de impuestos.



Funde también propuso un impuesto único.

Ese sí puede afectar a determinadas empresas. Impuesto de un año para la constitución de un fondo administrado de manera mixta con personas confiables, puede ser destinado a estimular la inversión. Hay maneras de poner impuestos que no asustan tanto, creo que tenemos que quitarnos ese estigma contra los impuestos, que todo impuesto es malo. Entiendo que hay impuestos recesivos, por ejemplo, a las ganancias, cuando no hay muchas ganancias, no es conveniente, o impuesto a la renta si ya tenemos un impuesto elevado. Por el lado del gasto, también, hay márgenes de hacerlo. Cosas menos dolorosas y con menos efectos electorales. La existencia de plazas fantasmas, es un gasto que se podría reducir. Cuente cuántas plazas fantasmas hay, es un dato que no sabemos, pero ahí puede hacer un buen ahorro. En compra de carros, combustible, viajes, seguros, cosas así. Puede hacer ahorros importantes en materia de licitaciones, si tiene una buena vigilancia. Puede ver dentro de la administración cuáles son las plazas creadas artificialmente simplemente para darle trabajo al militante. Hay que hacer una evaluación al desempeño. Luego, usted ve los gastos reservados, ya se ha reducido de $80 millones bajó a $40 y subió a $50 millones, pero creo que hay margen para hacer un ahorro. Los subsidios se pueden focalizar mejor.



¿Cuál es la propuesta para pensiones?

Dejamos el tema de la figura o propiedad para después, que si es mixto, privado. Esa discusión no debería hacerse de entrada, se presta a pasiones ideológicas o a intereses. Nuestra tesis es que en las actuales condiciones de mercado laboral, cotizaciones, retiro, tasa de reemplazo, cualquier esquema no va a funcionar, es insostenible cualquier esquema. En lugar de discutir cuál sistema es mejor, póngase a pensar cuáles son las cosas que le podrían dar sostenibilidad. Muchos han mencionado reformas paramétricas. Estamos planteando un aumento de la cotización en uno o dos puntos y también puede considerarse una reducción de las comisiones, porque las AFP (administradoras de fondos para pensiones) manejarían más dinero, tendrían un estímulo.



¿El aumento de la cotización, por parte de empleador y empleado?

Sí. Entiendo que hay una propuesta que van a lanzar, tiene aspectos que contemplan un incremento a la tasa de cotización. Otras reformas que hemos sugerido es el estímulo al mercado laboral, incorporar al seguro social y al esquema de pensiones a sectores informales en lo cual el Gobierno pueda contribuir a esa cotización, puede tener un estímulo. Lo otro es la tasa de reemplazo, el decreto 100, consideramos que podría considerarse una baja en la tasa de reemplazo.



¿Y aumentar la edad de jubilación?

Debería, pero la reacción política puede ser negativa. Entiendo que en esa propuesta viene algo que estimularía, nosotros no lo hemos planteado, para que voluntariamente la gente se retire más tarde. Lo otro, de largo plazo, sugerir mecanismos de crecimiento económico porque con un mercado laboral tan estrecho de las 60,000 personas que cada año entran al mercado laboral pero solamente entre 5,000 y 6,000 encuentran empleo formal, eso hay que aumentarlo. Lo otro es la tasa de rentabilidad.



¿Qué tan probable es que haya solución integral y no únicamente créditos?

Requiere de mucha visión e interés de país, no electoral. Así como veo las cosas, estos discursos agresivos, marchas, espionaje, vamos a seguir entrampados.



¿No ve un esfuerzo sincero?

No hay cosas en el ambiente que ayuden. Yo sí creo que la presión puede ser un factor positivo, la presión en el sentido de que si no hay un acuerdo con el Fondo (Monetario Internacional), el Gobierno, que tiene alta necesidad de dinero, no va a tener dinero, así de simple. Y si acaso tiene acceso a fondos, tiene que pasar dos situaciones: que se lo apruebe y tendrá que vender bien caro. Mire el problema que están teniendo ahora para colocar los $550 millones porque tenemos baja calificación de riesgo, el antecedente de Bolivia, eso no ayuda.