La fundadora de la Oficina de Asesoría Legal y Anticorrupción de El Salvador (Alac), la abogada Xenia Hernández, invita a no conmocionarse por las primeras investigaciones de corrupción impulsadas desde instituciones como la Fiscalía General de la República y Corte Suprema de Justicia, y a que, dentro de tres o cinco años, sea normal que las instituciones funcionen. Ningún caso de corrupción le impactó más que la actuación propia del fiscal general.

 

¿Cuáles han sido los logros y qué ha marcado el año 2016?

La entrega de las auditorías a las declaraciones patrimoniales marca un antes y un después, generan la investigación a tres expresidentes en cuanto a enriquecimiento ilícito, y ver que una Sección de Probidad está cumpliendo las atribuciones que le corresponden. Creo que todo salvadoreño está más complacido viendo que empiezan a funcionar las instituciones. Nunca habíamos visto ni siquiera que un caso pasara a la Cámara de lo Civil por enriquecimiento ilícito. También marca el trabajo que empieza a hacer la Fiscalía General de la República, ver que estas investigaciones a través de la Sección de Probidad empiezan a darse, las cámaras empiezan a hacer los juicios civiles que les corresponden, que la Fiscalía empiece a realizar investigaciones por enriquecimiento ilícito, ha sido algo que en El Salvador nunca había pasado. Después de 58 años tenemos la primera condena por enriquecimiento ilícito, de una ley que no era utilizada. Nunca habíamos tenido las investigaciones contra un exfiscal, tres expresidentes, uno asilado, esas son de las cosas lamentables, que el partido de Gobierno haya aconsejado para que el presidente (Mauricio) Funes se mantuviera en Nicaragua. Este año 2016 ha sido un terremoto para El Salvador en cuanto a lucha anticorrupción. En transparencia, gracias a la Ley de Acceso de Información Pública se permite a dos ciudadanos que conozcamos de esto, pero fue también a toda la población en general...

 

¿Responde esto a un ataque a ciertas personas o cierto tipo de ideologías?

No lo creo. Los que más se oponen son los que están metidos en actos de corrupción o tienen intereses y por eso vienen las campañas de desprestigio frente a los funcionarios que sí están trabajando en pro de una lucha anticorrupción y de la transparencia. De estos funcionarios, a lo largo del año hemos visto discursos de transparencia, pero cuando se empieza a efectuar una lucha anticorrupción empiezan a decir esto es una persecución política. Si vemos las características de persecución política, no la tiene el expresidente Funes, que ha sido asilado en Nicaragua buscaba huir posiblemente de los actos que él cometió. No puede ser una persecución. De igual manera, se están investigando personas de distintos partidos. Sabemos que no hay una Fiscalía totalmente fortalecida. Vemos una Sección de Probidad que no tiene la capacidad de personal técnico, infraestructura, herramientas. Como nunca ha pasado en El Salvador, por eso lo tienden a polarizar, es la forma más fácil de crear ese nivel de discusión.

 

¿Cree que este tipo de discursos aumentará en un año preelectoral como 2017?

Sí creo que van a salir saliendo (investigaciones), yo creo que va a ir aumentando la tensión entre los funcionarios que sí están haciendo bien su trabajo versus aquellos funcionarios que están llenos de discursos pero no de acciones concretas. Lo más grave es que la ciudadanía, por la ideología o pérdida de confianza por años, no logra llegar a informarse completamente, porque no es su interés, la población está tratando de resolver los problemas del día a día, como la falta de seguridad, canasta básica, empleo, transporte. Lo único que pueden ver son noticias muy mal informadas a través de redes sociales, páginas creadas para desinformar a la población y eso es lo que está generando más resentimiento social de unos con otros, cuando deberíamos luchar todos, unidos contra la corrupción, no importando de qué tipo de ideología sea, como un problema de país, no tiene nada que ver con un partido, con una ideología en sí.

 

¿La ciudadanía debe informarse bien y no caer en informaciones manipuladas?

Puede ser manipulada la información sobre los casos de corrupción. Entre mejor documentados estén cada nota periodística eso puede llegar a generar una credibilidad, a restaurar la credibilidad perdida en varios medios. El ciudadano tiene que informarse, pero si están tan preocupados en su supervivencia, por ejemplo, una persona en el área rural, ¿qué medio le va a informar?, los televisivos; su responsabilidad va a ser en esas notas tan rápidas, cómo lo obtuvieron, también organizaciones de sociedad civil. Eso es lo que viene, poder generar una nueva cultura que ya no veamos solo qué dijo este, qué dijo el otro, exigir campañas de calidad, exigir ir a votar por propuestas concretas y castigar a los corruptos. Ir eliminando. La ciudadanía no se ha dado cuenta que el poder lo tenemos nosotros. Nosotros estamos poniendo funcionarios de los que nos estamos quejando. ¡Quitémoslos! La lucha contra la corrupción no es de un solo lado y no es de la noche a la mañana. Tenemos que cambiar la cultura de: “Todos roban, pero este roba menos o hizo algo”. ¡No! Es que nadie tiene que robar.

 

¿Cómo lograr que la lucha sea un camino sin retorno?

Compromiso de todos, como la ciudadanía, de empezar a cuestionar, a formar en el interior del país el área de experticia que tengan. Es bien difícil. Hemos visto desplazamientos en la zona urbana donde la gente tiene que dejar sus casas. ¿Qué tienen ellos que exigir información o poner una denuncia si quizás no tienen dónde pasar la noche? Es la triste realidad que está viviendo la ciudadanía. Es el compromiso de, los que estamos trabajando en estos temas, ser responsables, criticar lo que hay que criticar, interponer las denuncias, los recursos, que la ley, la Constitución, nos otorga y llevar a que esto vaya cambiando, que las instituciones funcionen, así como empezó a funcionar una Corte, un Tribunal de Ética que deje de estar dormido, excepto resoluciones esporádicas (sobre Nayib Bukele y Luis Martínez), que empiecen a funcionar sus comisiones de ética. ¿Por qué la comisión de ética de la Asamblea nunca ha emitido una investigación de oficio si por todos es sabido lo que se está mal utilizando en la Asamblea? Otras organizaciones que puedan ir acompañando a presentar solicitudes, el compromiso y la voluntad política de los funcionarios, claro ejemplo es el fiscal general, sabemos que ha empezado esta lucha y estamos a la expectativa que no solamente sea ese show mediático, se sobredimensiona porque no habíamos tenido ese tipo de investigaciones. Qué lástima si estas funcionarios o exfuncionarios tomaron esas decisiones, que no nos conmocione eso, que en tres o cinco años, que cada vez que se encuentre un corrupto, que funcione el Tribunal de Ética.



¿Cree que la lucha anticorrupción no tiene retorno?

Podría llegar a tenerlo si se confabularan las instituciones, las cuotas partidarias, es lamentable cuando una diputada dice ‘Nos disculpamos con el pueblo por haber elegido a la Sala de lo Constitucional que está’. Si no tuviéramos la Sala de esa manera, o si se vuelve a elegir un fiscal general que pueda estar sirviendo a intereses partidarios, podría ser reversible la lucha contra la corrupción, pero también puede ser reversible si la ciudadanía y la sociedad civil no está atenta a eso. Un Instituto que funcione para que siga funcionando como hasta ahora, debe hacerlo mucho mejor. Sí puede llegar reversible en estos casos específicos, que esperamos que no se den.

 

¿Qué actores aún duermen?

Corte de Cuentas, Tribunal de Ética Gubernamental, podrían hacer mucho como instituciones fiscalizadoras. Es raro conocer que hubo un juicio de cuentas, excepto a un director de bien bajo nivel pero no donde se empieza la corrupción, un Tribunal de Ética que después de las reformas de 2011 crean las comisiones de ética que podrían estar vigilantes... Si se fortalecen estas instituciones, Fiscalía, Tribunal de Ética, Corte de Cuentas, Sección de Probidad, hay una cooperación interinstitucional, podemos ir sacando este país más adelante. Lo decía la embajadora: aquí hay dinero, ¿pero dónde se va? La corrupción no es solo del sector público, ¿por qué no investigar al corruptor?

 

¿Por qué cree que la depuración judicial nunca ha caminado?

Este 2016 ha comenzado a funcionar el aparataje fiscalizador; en eso estamos con una deuda de parte de la Corte Suprema, tiene que cambiarse y empezar a tener jueces que quieran ejercer una justicia justa. Esperamos que el 2017 sea un mejor año en esos temas. ¿De qué va a servir una investigación, si en los tribunales ahí van a morir porque hay jueces corruptos o las sentencias no son las justas por los actos cometidos?

 

¿Qué tan ejemplarizantes son los casos iniciados para futuros gobiernos?

Depende muchísimo de los personajes políticos que estén en cada partido, porque algunos son tan obstinados y no quieren ver lo que está pasando en la realidad, tienen una realidad alterna. Si estos políticos de verdad no quieren ver lo que está pasando, porque hay una ciudadanía más activa, porque empezaron a funcionar instituciones, simplemente no les va a servir de nada, van a querer hacerlo de otra forma, rebuscarse, como dice el salvadoreño y eso es lamentable para el país. Pero esperamos que sea un ejemplo claro para el político o el funcionario afiliado a un partido o que tienen interés de ser funcionarios a tener conciencia de que si quieren ser servidores públicos sean eso. No tengan que verse como un rey de una institución y ‘yo hago con los fondos lo que a mí se me dé la gana’.

 

¿Cuál es la revelación que más le impactó sobre corrupción?

Creo que son muchísimos casos, no tanto porque uno no supera que estaban pasando, sino por el valor y el coraje que el fiscal general ha tenido para sacarlos a la luz: el exfiscal general Luis Martínez, el empresario Enrique Rais, en lo personal me quedé ‘wow’, los han llevado a los tribunales, no cedieron a las presiones; el caso del expresidente Saca y los otros funcionarios. Más que impresionarme los casos, me ha impresionado el actuar del fiscal general, la valentía y el no ceder a las presiones con el carácter que tiene un fiscal que afrontarlo. Por eso el voto de confianza que pueda seguir progresando en los próximos tres años y que esperemos que la nueva Asamblea lo reelija a medida siga haciendo un buen papel.

 

 

Xenia Hernández

Graduada de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas”, especialista en derecho de acceso a la información pública, datos abiertos, ética pública y lucha contra la corrupción, trabajó en el Centro de Asesoría Legal Anticorrupción (ALAC), fue consultora para la Alianza para el Gobierno Abierto, impulsora de DatosElSalvador.org, ha dictado conferencias en Londres, Uruguay, México y Costa Rica. Participó en programas de estudio sobre herramientas para derechos humanos en Suecia y la Escuela de Integridad de Transparencia Internacional en Lituania.

 

 

En cuatro preguntas

 

¿Conocía de los sobresueldos desde la Presidencia de la República?

Es un secreto a voces pero no había algo que lo hubiese confirmado, pero agradecemos a la doctora (María Isabel Rodríguez) que lo haya confirmado.

 

¿Qué delitos ve?

Podría ser malversación de fondos, le corresponde a la Fiscalía según quién lo haya recibido. No tuvo que haber recibido por nadie, tuvieron que haber dado aviso al Tribunal de Ética para que empezaran a investigar. ¿Será que los miembros del Tribunal de Ética conocían? Si particulares recibieron dádivas, sobornos, habría que ver bajo qué contexto fueron entregados. ¿Por qué la Corte de Cuentas nunca fiscalizó?

 

¿Desafíos del año 2017?

Que la Fiscalía siga haciendo un buen papel, que los fiscales delegados sean comprometidos, que tengan apoyo técnico, que se haga una depuración para que a los tribunales a los que llegue sea el juez más probo, que haya mejor acceso a la información, una ciudadanía más participativa, una sociedad civil organizada más vigilante, que se compartan los conocimientos de la Ley de Acceso a la Información Pública, menos migración de la ciudadanía.

 

¿Cómo evalúa al Ejecutivo, Judicial y Legislativo en transparencia?

Un órgano Ejecutivo muy renuente a entregar información. La de la Asamblea, muy deficiente y ojalá que no sea parte de la propaganda del nuevo presidente de la Asamblea, que deja mucho que desear en cuanto que se le otorgó medio millón a la organización de su esposa, como en años anteriores hemos sabido que a otras instituciones se les otorgó donaciones. Una Corte Suprema que quizás tengan que ser más proactivos, hay un par de informaciones que todavía están renuentes. Todas las instituciones todavía deben mucho.