La seriedad de un interrogatorio de la Comisión Especial de antejuicio contra los diputados José Ilofio García y Gerardo Aguilar, se rompió este miércoles cuando los diputados de la comisión trataron de corroborar que uno de los señalados participó en una reunión con Roy García.

Uno de los entrevistados fue Rolando Rivera, supernumerario asignado al diputado Aguilar y comentó que en varias oportunidades lo acompañó a actividades.

El diputado William Soriano preguntó si escuchó algún audio de las reuniones ocurridas en octubre, supuestamente la ocurrida con Roy García.

Testigo: “No. Andaba en las redes un audio; pero que sea de esa reunión, la verdad, no lo sé”.

Soriano: ¿No lo ha escuchado o no lo sabe?

Testigo: Escuché un audio

Soriano: ¿sí lo ha escuchado?

Testigo: Ajá. Pero de esa reunión no lo sé si es de esa reunión.

 

El diputado Soriano continuó preguntando sobre los movimientos de los diputados en los vehículos la noche de la supuesta reunión.

Luego de las preguntas de la parte fiscal, el diputado Soriano retomó las preguntas.

 

Soriano: Usted aseguró que de alguna forma usted sí logró identificar la voz del diputado en las grabaciones. Nos puede explicar un poco más, por favor.

Testigo: ¿La voz de quién?

Soriano: Del diputado Gerardo Aguilar.

Testigo: No. La voz de él no le he dicho yo que la he escuchado bien. He escuchado unos pujidos (le interrumpe).

Soriano: ¿Cómo la pudo identificar?

Testigo: He escuchado unos pujidos y esos pujidos sí son de él.



Después de esa respuesta pasaron unos ocho segundos en completo silencio en la comisión y se nota que algunos legisladores contuvieron las risas.

Y se alcanza a escuchar que alguien, posiblemente el diputado Soriano pues es quien tiene encendido el micrófono, toma un amplio respiro antes de hacer la siguiente pregunta:

 

Soriano: Nos podría explicar un poco más a qué se refiere con eso, por favor.

Testigo: No, porque solo se hacía así ve ummm, ummm, ummm. Eso sí yo lo he escuchado.

El diputado Soriano no siguió preguntando más sobre la identificación de los “pujidos” y pasó la palabra a la defensa.