El Ministerio de Hacienda ha incluido en el presupuesto 2018 dos partidas presupuestarias para entregar los fondos estatales que les corresponden a los partidos políticos hacia las campañas 2018 y 2019.
Estos fondos son conocidos como “deuda política”, ya que Hacienda entrega siempre un anticipo antes de cada elección y el complemento, después de cada elección.
El presupuesto de 2018 incluye $3.3 millones por la participación de las elecciones 2018 y $9.9 millones de anticipo de deuda para las elecciones de 2019. Pero la entrega de esos fondos dependerá ahora del Tribunal Supremo Electoral (TSE). ¿Por qué? Una sentencia de la Sala de lo Constitucional dicta que si hasta el 1 de noviembre los partidos políticos no han dado toda la información sobre financiamiento partidario, “las autoridades competentes deberán abstenerse de entregar a todos aquellos partidos cualquier suma de dinero en concepto de deuda política” para 2018.
El mecanismo que usará el ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, para decidir si entrega la deuda política es consultar al TSE: así lo revela una carta del ministro dirigida a los magistrados del TSE.
“Me permito solicitar que se sirva informar a este Ministerio cuáles son los partidos políticos que le han dado el debido cumplimiento a lo ordenado por la Sala de lo Constitucional... a fin de que se puedan tramitar los procesos administrativos de pago de la deuda política” solicitada por los partidos que participen en las elecciones de 2018.
La carta es dirigida al presidente del TSE, Julio Olivo, y advierte que los partidos políticos deben proporcionar la información relativa al origen y destino de los fondos con que financiaron sus campañas electorales de 2014 y 2015. El TSE aún no ha definido como órgano colegiado si han cumplido o no con la información.