Con casi ocho décadas de vida, Juana Sosa de Guerrero, habitante de Usulután, comentó que desde que tiene edad para emitir el sufragio, ha votado.

Aunque por la edad, de 77 años, no puede caminar por sí misma y se moviliza en una silla de ruedas, este domingo le pidió a su hijo que la llevar al Centro de Gobierno, en Usulután, para que pudiera emitir su voto por el concejo municipal y diputados. Para ella, el sufragio es importante porque “soy salvadoreña y necesitamos que haya un alcalde que nos ayude”.

Cuando aún podía, Juana se dedicaba a servicios domésticos en la colonia Los Naranjos, Hacienda La Carrera, de Usulután. Sin embargo, hace unos años se sometió a una cirugía en la cadera, problema que aún tiene. Sin embargo, agregó, “si yo tuviera dinero ya me hubieran operado”.

“Yo le decía a unas vecinas que fuéramos a votar, no, me dijeron. Fueron a buscarme para traerme. Queremos servir y que nos sirvan también. Siempre he venido a votar, todavía después de la primera operación que tuve, no pude venir a votar”.