Hugo Martínez, precandidato a la presidencia por el FMLN


El exdiputado y actual canciller del FMLN, Hugo Martínez, aspira llegar a la Presidencia de la República, se declara como una persona con mentalidad abierta, interesado y con capacidad de tender puentes y mantener interlocución con partidos, incluso tradicionalmente vistos como contrarios. No ve débil su candidatura por provenir de Cancillería, sino al contrario, destaca su capacidad de dialogar con diferentes líderes mundiales. Aunque se define de izquierda y progresista, sostiene que lo que le interesa es que las cosas funcionen.

 

¿Cómo tomó la decisión de inscribirse para ser candidato presidencial del FMLN?

Es una decisión que la he venido reflexionando a raíz sobre todo de las nuevas condiciones y el mensaje del 4 de marzo, es un mensaje muy claro a todos los partidos, no solo al FMLN, donde la población dice: señores, queremos que los partidos hagan un cambio, que sean más democráticos, transparentes, participativos, pero sobre todo, que nos resuelvan los problemas y que nos escuchen; en esa dirección va a ser el énfasis de mi trabajo de campaña en las internas y en las nacionales, escuchar a la gente, trabajar, estar entre la gente. Los partidos deben adecuarse cambiar sus métodos y estilos porque si no van a entrar a una crisis. Lo que hemos visto en otros países es que, cuando el sistema político entra en crisis, a veces la medicina es peor que la enfermedad. Es importante que el FMLN recupere la esperanza, el sentido de victoria y que siga siendo un sujeto histórico clave.

 

¿Esto no lo sabía antes del 4 de marzo?

La población nos ha venido enviando señales, el 4 de marzo es un hito. Es algo que se venía analizando y algunos lo habíamos venido diciendo, desafortunadamente fue necesario ese mensaje tan contundente de la población para que se empezaran a tomar algunas acciones. Una acción importante es el cambio de postura de la dirigencia del partido, que antes del 4 de marzo estaba hablando de una candidatura en particular, ahora dicen “Vamos a abrir a un proceso interno” y que sean las bases las que decidan.

 

¿Confía en la legitimidad del proceso, en que no sea un teatro?

Yo me voy a inscribir de buena fe y espero que las elecciones sean democráticas, transparentes, participativas y que todos tengamos condiciones iguales para la competencia electoral interna. Confío en que la dirección mantendrá su palabra de no respaldar una candidatura, sino que las bases van a estar vigilantes de que el proceso sea democrático. Por eso he hecho un llamado a las bases, sobre todo a los militantes históricos, veteranos, excombatientes, que no se queden al margen, hasta el domingo que cierra la inscripción, que acudan a las oficinas municipales, departamentales, a pedir participación, a que se les incluya en el padrón, para que puedan ejercer su voto el 27 de mayo.

 

¿No cree que la contienda nace cargada?

El respaldo que la dirección dio el 4 de marzo es un capítulo que quedó atrás. No aspiro a ser el candidato de la dirección, de un sector del partido, aspiro a ser candidato de las bases del partido.

 

¿Quiénes lo acompañan en la aspiración?

Los respaldos van a ir surgiendo, he recibido muchos llamados de personas que están en responsabilidades, en la dirección del partido, en el Gobierno, en gobiernos municipales, en la Asamblea Legislativa, pero muy importante el apoyo que he recibido de veteranos de guerra, excombatientes, militantes históricos, de la juventud, de las mujeres, profesionales, intelectuales, incluso empresarios que han visto con buenos ojos la candidatura.

 

¿Participará en fórmula?

En este momento, el proceso está diseñado para decidir quién será el candidato presidencial, posteriormente se decidirá sobre la vicepresidencia teniendo como contexto la política de alianzas que va a establecer el partido. En ese tema de la política de alianzas, yo tengo mucho que decir porque quiero insistir en que la mejor forma de resolver los problemas de nuestra gente es uniéndonos con todos los sectores y la mejor forma de garantizar una victoria del FMLN es buscando una alianza con diferentes sectores, sociales, políticos, progresistas, que estén en sintonía con las propuestas que realiza el FMLN y que pide la población.

 

¿Haría coalición con un partido sin importar ideología?

Ese es un proceso que tiene que irse madurando pero Hugo Martínez tiene una mentalidad abierta, los problemas no se pueden resolver en solitario y por lo tanto tiene que haber mucho diálogo, alianzas, no solo partidos sino sectores sociales. Lo fundamental es que esos sectores, esos partidos, nos podamos poner de acuerdo e impulsar las cosas en las que coincidimos y no en las diferencias, porque siendo partidos no vamos a estar de acuerdo en todo. Estoy dispuesto y siempre tendré la mano extendida para lograr acuerdos, incluyendo acuerdos con las diferentes fuerzas políticas y sociales, incluyendo acuerdos para una alianza victoriosa, una alianza amplia, de país, que garantice la gobernabilidad y el gobierno en los próximos años.

 

¿Ve posible alianza con Nayib Bukele?

Esas son las cosas que se deben ir conversando. He dicho que apenas estamos a 24 horas de haber realizado el anuncio de participar en las internas, necesito digerir un poco en primera persona este proceso y necesito dialogar con las bases del partido, con la dirección del partido y poner en perspectiva todas esas posibilidades, todos esos esquemas de trabajo que se puedan ir generando a partir de una decisión que tomen la militancia el 27 de mayo.

 

¿Qué lo distingue a usted en comparación con Gerson Martínez?

No quisiera entrar en el terreno de las comparaciones. Creo que cada uno tiene razones por las cuales participar en el proceso, sus cualidades. Para mí lo más importante que debe analizar nuestra militancia es que esta no es una elección para elegir la dirigencia del partido, esto es una elección para elegir a la persona que nos va a representar en la contienda nacional. Lo que la militancia tiene que analizar, después de escucharnos, ver nuestra trayectoria profesional, formación académica, es quién será el candidato que tiene más posibilidades de victoria frente a los adversarios que presentarán los otros partidos.



¿Una visión más estratégica?

Pero no solo una visión estratégica, sino una posibilidad real de ganar, una capacidad de hacer alianzas, tender puentes y hacer interlocución, incluso con partidos o personas colocadas tradicionalmente en las antípodas con el FMLN. Hay una experiencia con todos los gobiernos del mundo, independientemente del signo. La candidatura de cualquier compañero la respeto. Espero que esta campaña interna y la nacional sea centrada en las propuestas y en la capacidad, y no en campañas sucias.

 

Usted fue identificado como renovador del FMLN, ¿dónde se ubicaría si 10 es izquierda y si 0 es centro izquierda?

Hay que romper esos paradigmas. Es como la guerra fría, quedó atrás. Esos clichés quedaron atrás. Ahora si queremos hacer una discusión conceptual, para mí un asunto muy importante es que las cosas funcionen y que debemos sacar lo mejor, pero realizando un modelo propio como país, salvadoreño. Si tú me preguntas si estoy en la disyuntiva Estado-mercado, no, porque se ha comprobado que pueden convivir, es necesaria la existencia del Estado. Pero quizás vamos a discutir el tamaño, ahí hay un factor muy importante, que es la eficiencia y la capacidad de entregar resultados del Estado. Un Estado fuerte sin intervenir en otros asuntos perfectamente se puede llevar a cabo ese proceso y no tener esa falsa disyuntiva. Soy un hombre de izquierda progresista, de izquierda democrática. La mayoría del FMLN lo que quiere es lograr una mayor justicia y oportunidades para todos y todas.

 

¿Por qué hay pérdida de credibilidad en ARENA y FMLN?

La gente no está conforme con el desempeño de los partidos. Hay otra cosa que la gente nos viene diciendo: dejen de pelear y pónganse de acuerdo. Lo que debemos estar claros es que no es cierto que la retórica altisonante en los partidos a estas alturas logre ganar votos, quizás en otros tiempos, pero en este momento la gente dice: no queremos esa retórica altisonante, lo que yo quiero es que me resuelvan mi problema y que no se estén echando la culpa entre ustedes.

¿Qué tanto afectó al FMLN la tolerancia a la corrupción?

La corrupción es una epidemia que afecta a todas nuestra sociedad, no solo a los partidos, también a las empresas. Mi punto es que ningún partido, ninguna organización, empresa, tiene por qué ignorar o proteger a un miembro de esa empresa, partido u organización cuando tiene señalamientos de corrupción, por supuesto, respetando el debido proceso. Ese es un punto fundamental que se debió tomar hace mucho tiempo y que se debe tomar de ahora en adelante. Ninguna persona que esté señalada o investigada debe ser cobijada por una organización, partido o empresa, esa persona debe defenderse.

 

 

En cuatro preguntas

 

¿Qué problema no ha resuelto el FMLN?

Vamos a quedarnos con los mensajes generales que la población nos dio: que nos escuchen, que tomen en cuenta nuestras propuestas, que no digan que saben lo que queremos sin haber dialogado directamente. Son mensajes para todos los partidos. Yo trato de trasladar esas preocupaciones al partido y que devolvamos la esperanza a nuestra población.

 

¿Cómo resolvería el problema fiscal del país?

Son preguntas programáticas, lo que sí puedo decir es que para mí ha sido muy importante el último diálogo que se dio entre los partidos. Los problemas fiscales del país no se pueden resolver en solitario.

 

Roberto Cañas decía que las candidaturas de cancilleres son débiles.

Siempre que se haya quedado uno en esquemas tradicionales de la diplomacia puede tener esa perspectiva, pero he tratado de hacer un ejercicio que vincula la gestión en el exterior con la vinculación en el terreno de esa gestión. Hemos conseguido una cifra récord de cooperación de más de $1,400 millones y me he ocupado de ir a supervisar que esos dineros se estén ejecutando. Hay que reconocer que sí ha habido una limitante, que siendo el ministro de relaciones exteriores, ahora voy a enfocarme tiempo completo en el territorio, la ventaja es que mucha gente ya me conoce.

 

¿Cómo aplicará la transparencia como candidato?

Lo que he dicho del mensaje que nos dio la población, es un mensaje que se debe aplicar, tenemos que ser partidos más transparentes, más democráticos, más participativos. Vengo de una experiencia de rendición de cuentas muy grande, esos $1,400 millones de cooperación que manejamos (en Cancillería), cada centavo, quién lo da, por qué lo da, a qué sector va, a qué territorio va, ese es un ejemplo de lo que hemos hecho al frente de la Cancillería y es un ejemplo que puede servir de referente en esta campaña interna de cómo vamos a ser en la campaña interna y nacional, siempre vamos a estar abiertos.

 

Perfil

Originario de Concepción de Oriente, La Unión. Sus mejores años de vida, dice, los pasó en el campo. Su madre y su padre fueron docentes normalistas. Fue líder esstudiantil y se graduó de ingeniería agronómica en la Universidad de El Salvador. Fue el primer coordinador de la Juventud del FMLN. Estudió becado en Francia en recursos humanos. A su regreso fundó junto al excoordinador del FMLN, Fabio Castillo, el Instituto de Ciencias Políticas del FMLN. Hizo dos periodos en la Asamblea Legislativa y antes de su tercer periodo fue nombrado canciller.