A pesar de que el presidente de la república, Nayib Bukele y los diputados oficialistas de la Asamblea Legislativa insisten en que las disposiciones transitorias de suspensión de concentraciones de personas y eventos públicos o privados no prohíben las marchas, diputados de la oposición sostienen que el decreto habilita la represión de las manifestaciones.

La diputada Dina Argueta, del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), expresó que el decreto aprobado en la sesión plenaria del pasado miércoles “se hizo para criminalizar las marchas, para criminalizar la movilización de la población”.

Para la legisladora, el decreto de medidas transitorias hace una valoración de los tipos de concentraciones que no afecten intereses. “Pareciera que algunos esfuerzos no son malos, pero hay otros que sí. Entonces, ¿cuáles son los malos? Aquellos que tienen la manifestación de la gente en contra de las decisiones que se están tomando en este país”, argumentó la diputada de oposición.

“Además de las inconsistencias y contradicciones, esta ley transitoria que fue aprobada es tan ambigua y discrecional que la autoridad, en efecto, tiene amplio margen para reprimir”, dijo John Wright Sol, de Nuestro Tiempo.

No obstante, agrega que la ciudadanía “tiene amplio margen para desobedecer. Al final, perdemos todos”, expresó.