El diputado Reynaldo López Cardoza aseguró que el Partido Concertación Nacional (PCN) está dispuesto a dar sus votos para la emisión de $900 millones en títulos valores, con los cuales se pagaría parte de la deuda acumulada de Letras del Tesoro Público de El Salvador (Letes).
“Si no, caemos en un impago, yo creo que es una responsabilidad de todos los grupos parlamentarios y de todos los diputados y diputadas”, afirmó.
El legislador, sin embargo, advirtió que deben revisar antes “dónde se va a utilizar el dinero” y “con todo gusto nosotros damos nuestros votos”.
La deuda del Gobierno en Letes asciende a $967.7 millones, a octubre. El Gobierno anterior cerró en mayo con un saldo en Letes de $768 millones y dicho saldo aumentó $853.3 en junio. En la transición del gobierno, la Asamblea Legislativa no le limpió la conocida “tarjeta de crédito” al Gobierno entrante.
Arena está abierta, pero prefiere revisar la solicitud de emisión. El subjefe de fracción de Arena, Julio Fabián, dijo que se debe revisar, verificar y comprobar si los títulos valores van destinados al pago de deudas. “Si hay una obligación que cumplir, pues uno está en la disponibilidad, pero no se puede decir que sí cuando uno no tiene pleno conocimiento en qué o cómo se va a invertir toda esa plata”, señaló.
La semana pasada, el diputado Norman Quijano, de Arena, criticó el “desorden financiero” que implica este refinanciamiento, asegurando que “está pidiendo tener la chequera abierta y visible con deuda de corto plazo” y anunciando que esperarán “a recibir la propuesta de Hacienda”.
Por su parte, la jefa de fracción del FMLN, Nidia Díaz, consideró en declaraciones brindadas la semana pasada que “incrementar más los niveles de endeudamiento cuando se había votado por limpiarlos, no se puede”.
Luego de cancelar las Letes, el Ministerio de Hacienda estará autorizado a emitir nuevamente deuda a corto plazo, hasta por un 20 % de los ingresos corrientes del Estado en 2020, lo que implica que podrá emitir Letes por hasta $1,022 millones. Las Letes son utilizadas por los gobiernos para sufragar deficiencias temporales de caja durante la ejecución presupuestaria.