El Tribunal Supremo Electoral (TSE) tuvo resultados preliminares con 97.15 % de actas procesadas a las 3:30 de la mañana durante el simulacro de transmisión de resultados preliminares presidenciales ante las elecciones del 3 de febrero próximo.
El TSE elaboró actas ficticias correspondientes a las 9,568 Juntas Receptoras de Votos (JRV) de todo el país. A las 5:00 de la tarde del domingo transmitió dichas actas mediante los escáneres y trasladó físicamente las que no pudo transmitir –por fallas en la señal de interet– a un “Centro de Contingencia”, que recibió la última acta a las 00:35 de este lunes.
El Centro de Procesamiento de Resultados Electorales (Cnpre) recibió la última acta, según el TSE, a las 2:57 de la mañana, obteniendo resultados preliminares con casi todas las actas procesadas a las 3:30 de la mañana.
Sin embargo, no todas las actas fueron procesadas: hubo 273 que por alguna razón no se pudieron procesar. Según el magistrado Miguel Ángel Cardoza, algunas de estas 273 actas fueron mal escritas intencionalmente para que fueran improcesables y así probaran la fortaleza del sistema de procesamiento de resultados preliminares.
¿El sistema falló de alguna forma en procesar estas actas?, le preguntó El Mundo.
“El sistema no falló; 273 actas el día de las elecciones no son para nada incidentes. Con el 91.46 % de actas ya es suficiente para dar una tendencia el día de las elecciones. Nos vamos al escrutinio final que es el día que realmente interesa”, respondió.
Si los resultados son tan cerrados y esas actas fueran incidentes, es decir, pudieran cambiar el resultado, el magistrado recordó que eso se dirime en el escrutinio definitivo.
Según Cardoza, en el procesamiento de resultados preliminares, si un resultado es digitado incorrectamente el sistema tendría que ponerlo a cero, aunque en la digitación del acta 1903 fueron digitados más votos de los reales y el sistema de conteo preliminar los aceptó [nota aparte].
Cardoza es enfático al decir que nadie se podrá declarar ganador con las tendencias que darán en los resultados preliminares puesto a prueba desde el domingo a través de este simulacro, ya que eso se dará en el escrutinio final. Esto se debe, según el funcionario, a que el sistema informático utilizado en el escrutinio definitivo es distinto al utilizado en el preliminar.
En el escrutinio definitivo, previsto del 5 al 11 de febrero, los miembros de los partidos políticos cuentan los votos en conjunto con actas de JRV en mano.