El Gobierno propuso el martes pasado el voto en forma electrónica para los salvadoreños en el exterior, a través de internet o de manera presencial. Sin embargo, los magistrados no quisieron referirse específicamente a la propuesta ya que no la conocen de manera oficial.
La presidenta del TSE, Dora Martínez de Barahona, sostuvo que el uso de tecnología facilita el derecho al sufragio de la ciudadanía pero que se debe tomar en cuenta “la planificación, organización” para implementarse y “el tiempo para ello”. “Así mismo, contar con las disponibilidades presupuestarias y las proyecciones del órgano electoral para el proceso 2021, que ya está en marcha”.
La funcionaria dijo que, independientemente del mecanismo que se apruebe para el voto en el exterior, el compromiso del TSE es que la mayor cantidad emita su voto. Aseguró que harán lo que les mande la ley.
De acuerdo al magistrado Noel Orellana, se necesita un estudio “muy responsable” para determinar no solo la credibilidad de la modalidad de votación sino las condiciones y el tiempo disponibles. “Ya no es cuestión de conveniencia o no, se tienen que valorar aspectos de tiempo pero principalmente aspectos relacionados al financiamiento”, manifiesta.
Por su parte, el magistrado Rubén Meléndez, también ve necesario un estudio para evaluar la aplicación de una modalidad electrónica de votación, ya sea urnas electrónicas o voto por internet que, aclaró, son cosas diferentes. “Uno de los temas a analizar es el tema presupuestario. Lo podemos llevar a cabo con el factor tiempo y, dos, el factor económico”, subraya.