Las Administradoras de Fondos para Pensiones (AFP) tienen "un papel” en el diseño del sistema de pensiones propuesto a la Presidencia de la República por el Ministerio de Hacienda, dijo ayer el ministro del ramo, Alejandro Zelaya.
Sin dar más detalles, Zelaya indicó en una conferencia de prensa que al final será el presidente de la República, Nayib Bukele, quien decidirá "la mejor propuesta” de sistema que "mejor se adapta” a su oferta de campaña.
Reiteró que el gobernante recibe insumos para conformar el proyecto que presentaría ante la Asamblea Legislativa.
Se refirió a las AFP como parte del diseño propuesto: "El Presidente tiene la iniciativa, él está recibiendo insumos no solo de Hacienda, nosotros presentamos un anteproyecto en el que las AFP tienen digamos un papel en el diseño”, fueron sus palabras, expresadas en una conferencia frente a la Fiscalía General de la República (FGR).
"Costo político”.
El Plan Cuscatlán indicó que el Gobierno "asumirá el costo político que implica un nuevo esquema de pensiones que los gobiernos anteriores han evitado asumir”.
Este plan de gobierno presentado durante la campaña presidencial de Nayib Bukele prometió la existencia de "variedad de opciones de inversión para la rentabilidad de los ahorros”, menor costo de administración y mayor porcentaje del último salario para el cálculo de pensión.
Organizaciones sindicales que integran la Unión Sindical Salvadoreña se reunieron en Casa Presidencial el 7 de octubre; ahí propusieron al presidente de la República pensiones equivalentes al 70 % de los últimos salarios recibidos; una pensión universal financiada del cobro de impuestos como predial, al patrimonio o de la misma recaudación de IVA.
El punto de honor, según los sindicatos, es la mejoría del monto de las pensiones. Sostenibilidad.
Para el economista José Luis Magaña, el Estado debería asumir el costo político para tomar decisiones "que garanticen efectividad y sostenibilidad”. Magaña cree que sería un error limitarse a aumentar el monto de las pensiones sin asegurar financiamiento y sostenibilidad del sistema, ya que el fondo se agotaría en unos años. "Ni que sea privado ni que sea público es garantía de nada”, dice. Él cree que la decisión es política y sugiere que el financiamiento se obtenga de recaudación de impuestos. Otro elemento indispensable, según Magaña, es aumentar la cobertura, ya que también sería un error que el Estado se limitara a subsidiar pensiones únicamente de los trabajadores que cotizan a un sistema de pensiones.
La propuesta de un grupo de sindicatos que se reunió con el presidente Nayib Bukele el 7 de octubre de 2021 es crear un impuesto especial a las grandes empresas para el fondo de pensiones, un impuesto predial y al patrimonio.
Para Paz Zetino, de Bases Magisteriales, organización de docentes que reclaman no han sido consultados por Presidencia, sugieren bajar la comisión de administración y que el Estado pague interés de mercado por los ahorros de los trabajadores.
¿Qué ha ofrecido el gobierno sobre el sistema de pensiones?
La reforma de pensiones fue una promesa de campaña de Nayib Bukele. Como presidente, prometió un proyecto en septiembre de 2021 pero optó por estudiar más el tema.
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