Fundaungo compara la opinión pública durante los años y señala que el presidente Nayib Bukele ha mantenido su aprobación, pero las alcaldías han caído.
Solo dos de cada cinco salvadoreños creen que sus intereses están mucho o algo representados por sus gobiernos municipales, mientras que tres de cada cinco cree que sí lo son por la Presidencia de la República.
Así lo encontró una encuesta realizada por la Fundación Dr. Guillermo Manuel Ungo (Fundaungo) publicada en septiembre, realizada en junio pasado a 3,000 personas y con un error de 1.8 %.
La aprobación de la población hacia los gobiernos locales cayó ocho puntos en menos de un año, del 57.6 % en 2021 a 49.4 % en 2022 , tomando las opiniones sobre un trabajo "muy bueno” y "bueno”.
Mientras que el presidente Nayib Bukele ha mantenido un nivel de aprobación en tres años consecutivos: de 91.1 % en 2020 bajó a 86.5 % en 2021, y luego subió levemente a 89 % en 2022.
El presidente es calificado con una nota promedio de 8.2, le sigue la Asamblea Legislativa con una nota de 7.2 y por último están los concejos municipales, con 5.6.
¿Confianza?
Las alcaldías municipales poseen un nivel de confianza de 43.1 en una escala del 0 al 100, en donde 100 equivale a mucha confianza y 0 a ninguna, indica el estudio.
La Asamblea Legislativa tiene un nivel de confianza promedio de 50.7, mientras el presidente logra un promedio de 69.5 de confianza.
Este índice fue obtenido de equiparar las respuestas mucha, alguna, poca o ninguna confianza a la escala del 0 al 100 y calcular el promedio de las diferentes opiniones.
El giro.
El trabajo de las municipalidades fue evaluado como malo o muy malo por el 33.2 % de las personas entrevistadas en noviembre-diciembre de 2021, pero en junio de 2022 este porcentaje aumentó a 44.5 %, de acuerdo a la encuesta divulgada el viernes por la Fundaungo.
Bajo la misma tónica, las opiniones positivas disminuyeron, tanto las que consideraron el trabajo como muy bueno (de 15.2 % a 12.4 %) o como bueno (42.4 % a 37 %).
Alza leve del aval al Legislativo.
La aprobación del trabajo del Poder Legislativo aumenta levemente del 77.6 % al 81.4 %, un crecimiento de 3.8 puntos. Sin embargo, a los salvadoreños les interesa que la Asamblea Legislativa escuche a los diferentes ciudadanos y especialistas, se preocupa por la deuda pública y además está a favor de que sea un contrapeso frente al Ejecutivo.
Seis de cada diez encuestados manifestó estar muy o algo preocupado por los préstamos aprobados por la Asamblea Legislativa y el siete de cada diez cree que la Asamblea Legislativa debe ser un contrapeso al Poder Ejecutivo.