Dos peritos de la UES traducirán documentos ligados a la cuarta etapa del caso Saca
Jueves 30, Septiembre 2021 - 4:27 PM
En el cuarto caso penal ligado al proceso de lavado de dinero del expresidente Antonio Saca, el Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador juramentó a dos peritos de la Universidad de El Salvador para que traduzcan documentos relacionados con la empresas de al menos nueve procesados.La fiscalía explicó que la jueza autorizó pedir dos peritos a la Universidad de El Salvador para hacer la traducción de inglés a castellano, y hoy fueron juramentados.Esta traducción servirá para anexarla al peritaje financiero contable que se hace en este caso, por el supuesto lavado de $16 millones, que según la Fiscalía General de la República fueron extraídas de las cuentas de Casa Presidencial.ENTÉRESE: "El cerebro” que movió millones de dólares desde Capres en el gobierno Saca, según fiscalíaLa fiscalía ha acusado a nueve personas: José Eduardo Mixco, quien es primo de la exprimera dama de la República, Ana Ligia de Saca.También son procesados los hermanos Carlos Rafael y Federico Antonio Barillas Flores, quienes eran representante de la sociedad Salvataje de deuda, y por medio de la cual, la Fiscalía asegura que se blanqueó $1,963,459, a través de cheques recibidos entre el 24 de abril del 2012 y el 15 de enero del 2015.También fueron acusados Rosa Miriam Salinas de Aviles, Juan Francisco Guerrero Chacón, María de la Luz Pérez Franco, Julio Ernesto Mena Campos; todos los anteriores tienen medidas alternas a la detención.Además, están procesados los esposos Irving Pavel Tóchez Maravilla e Ivett Fidelia Salinas de Tóchez, ambos tienen calidad de prófugos en este proceso.En esta investigación, la fiscalía sostiene que los procesados utilizaron sociedades de papel para el blanqueo de dinero, y por ello investiga a Inter-Corp S.A. de C.V., Salvataje de Deudas S.A. de C.V., Consultores S.A. de C.V. Varin Inversiones S.A de C.V., y Laboratorios Farma S.A. de C.V.La fiscalía explica que algunos de ellos si tenían funcionamiento, pero habían reportado pérdidas; ese panorama cambió cuando empezaron a recibir fondos de Casa Presidencial, durante el gobierno de Saca.