Fuerza Solidaria se financia de sus propios líderes dice Soto

Representantes de Fuerza Solidaria declararon que su financiamiento político sale de los bolsillos y del trabajo voluntario de cada uno de los dirigentes departamentales y de la directiva, Luego de recibir los libros sellados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para recolectar 50,000 firmas, el presidente del movimiento, Rigoberto Soto, dijo que Fuerza Solidaria se sostendrá en este periodo del financiamiento de sus propios líderes. El exfuncionario sostuvo que, cuando Fuerza Solidaria sea inscrito como partido, podrán recibir dinero de sectores económicos, sociales o políticos, y luego podrán recibir la deuda política, que es el financiamiento público que por ley otorga el Ministerio de Hacienda a los partidos políticos. Según el exdiputado Arturo Magaña, fundador de Fuerza Solidaria, los directivos y la militancia del partido político en organización han estado trabajando en la constitución del movimiento de forma voluntaria y sin pedir una compensación económica a cambio. Hace tres meses, el vicepresidente de la Asamblea Legislativa, Guillermo Gallegos, aseguró que operadores políticos financian Fuerza Solidaria como Herbert Saca; Magaña lo negó.

De "derecha”.

Al ser cuestionado sobre la ideología y los estatutos del partido en organización, Rigoberto Soto respondió que Fuerza Solidaria se define como un partido inclinado en la corriente de derecha, pero afirmó que no estaban de acuerdo sobre cómo los partidos tradicionales de derecha e izquierda han manejado las decisiones del país. Soto manifestó que su partido está a favor de la empresa privada y de los inversionistas nacionales, remarcando que el movimiento está conformado en su mayoría por empresarios que profesan la religión cristiana. Ante las críticas sobre las recientes incorporaciones de exfuncionarios, Magaña declaró que están abiertos a la crítica.

Esperan recolectar 60,000 firmas.

El TSE entregó este miércoles a Fuerza Solidaria 600 libros firmados y sellados. Cada libro tiene 100 hojas. El partido en organización tiene 90 días para recolectar al menos 50,000 firmas o huellas; luego deben devolver los libros al TSE que las revisará. Soto dice que pueden llegar a recolectar 60,000 firmas.