¿Puede haber vida en el interior profundo de Marte?

Jueves 24, Septiembre 2020 - 9:14 AM
Europa Press.
Marte o la Luna carecen de una atmósfera que permita agua líquida en su superficies, pero las regiones más cálidas y presurizadas del subsuelo podrían permitir la química de la vida en agua líquida.Es la conclusión de un estudio sobre si las condiciones propicias para la vida podrían existir en las profundidades de la superficie de objetos rocosos como la Luna o Marte en algún momento de sus historias y cómo los científicos podrían buscar rastros de vida pasada del subsuelo en estos objetos.La investigación analiza el "espesor" de la región del subsuelo, donde el agua y la vida podrían existir en principio, de los objetos rocosos cercanos, y si las altas presiones en ellos podrían descartar la vida por completo.La investigación, dirigida por los científicos del Center for Astrophysics Harvard & Smithsonian Avi Loeb y Manasvi Lingam, descubrió que el límite de material biológico "podría ser un pequeño porcentaje del de la biosfera del subsuelo de la Tierra y mil veces más pequeño que la biomasa global de la Tierra", dijo Loeb, y agregó que los criófilos, organismos que prosperan en ambientes extremadamente fríos, no solo podrían sobrevivir potencialmente, sino también multiplicarse, en cuerpos rocosos aparentemente sin vida. En cuanto a la búsqueda de vida en el subsuelo de la Luna y Marte, los investigadores señalan que no será fácil, ya que requiere criterios de búsqueda y maquinaria que aún no está en uso en ninguno de los cuerpos vecinos.Sin actividad geológica no se podrán explorar Loeb agregó que en términos de maquinaria, "necesitamos poder perforar decenas de kilómetros bajo la superficie de Marte, y sin actividad geológica que exponga estas capas profundas, no podremos explorarlas".Sin embargo, los desafíos no significan que sea imposible encontrar vida en la biosfera del subsuelo de un cuerpo rocoso, incluso en un futuro cercano. Agregó que si las futuras misiones a Marte y la Luna desentierran vida subterránea, los mismos principios podrían aplicarse a las misiones que se dirigen mucho más lejos. La investigación se publica en The Astrophysical Journal Letters.