Reiteran a las autoridades correspondientes que se realice una "investigación ágil y exhaustiva” en el caso por el que se ha capturado a su estudiante.
El decano de la Facultad Multidisciplinaria Oriental de la Universidad de El Salvador (FMO-UES), Cristóbal Ríos Benítez, solicitó a las autoridades del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública y al Órgano Judicial, que se respete la presunción de inocencia en el caso del médico capturado por la muerte de una embarazada en el hospital San Juan de Dios, en San Miguel.
"Solicita a las a autoridades de Seguridad Pública y del Órgano Judicial, que se cumpla el artículo 12 de la Constitución de la República de El Salvador, que indica que a todo ciudadano, que por cualquier motivo tenga que verse sometido a un proceso judicial, se le debe respetar la presunción de inocencia, hasta que sea vencido en juicio y se compruebe lo contrario", reza parte del comunicado compartido por la UES.
A su vez pidió a las autoridades correspondientes que se realice una "investigación ágil y exhaustiva", ante la captura del médico. Asimismo envió sus condolencias a la familia de la víctima, identificada como Alondra Amaya de 19 años de edad.
Además, explicó que Carlos Josué Romero Blanco, el médico capturado el viernes, es residente del Hospital Nacional San Juan de Dios de San Miguel. También comunicó que Romero Blanco se encontraba estudiando la especialización en Ginecología y Obstetricia de la Escuela de Posgrado y Educación Continua de la Facultad Multidisciplinaria Oriental de la UES.
comunicado.
El llamado a la población
El decano de la facultad también hizo un "llamado a la consciencia" de la población en general, a guardar la cordura y "dejar de reproducir comentarios de odio y repudio", en contra de del médico, que lejos de abonar a solucionar la situación: lo que hace es "incrementar el dolor de la familia de la madre fallecida y del profesional de la salud involucrado".
El viernes el Ministerio de Salud informó sobre la destitución de un médico, quien presuntamente atendió el pasado 16 de julio a una mujer en estado de embarazo en el Hospital Nacional San Juan de Dios, en San Miguel y que posterior al parto murió tras haberle realizado una cesárea. Según la versión oficial de Salud la muerte ocurrió por omisión de protocolo.
Tras el reporte de las autoridades de Salud, la Policía Nacional Civil (PNC) procedió a la captura de Romero Blanco el mismo viernes, a quien las autoridades lo acusaron de "mala praxis". Ante la viralización del caso, la Asociación de Ginecología y Obstetricia de El Salvador pidió al Gobierno se respete el debido proceso en contra del médico.