A pesar de las críticas a su planteamiento y a los silbidos de la afición en varios momentos del partido, el entrenador David Dóniga se mostró satisfecho por la victoria de El Salvador 1-0 sobre Bonaire y minimizó los comentarios negativos.

"Lo importante era lograr el objetivo. Nos permite llegar a la última jornada dependiendo de nosotros mismos. Nos sentimos orgullosos de representar a la afición”, dijo el español, que nuevamente se presentó en el Cuscatlán con saco. "Es emocionante poder ganar en el Cuscatlán después de tres años, no se ganaba aquí desde octubre del 2021", agregó.

"Me hubiera gustado golear para la afición, pero no es fácil" confesó. Y dejó un mensaje para la afición: “Estoy orgullo de representar a vuestro país que ya es el mío. Estoy orgulloso de que me critiquen, que sean severos”.

Sobre el juego, en el que tuvo que sufrir hasta el 83’ para resolver un partido que en los papeles era sencillo explicó: “No hemos sido eficaces. Nos hubiera gustado tener más controlado el partido desde el principio".

También se refirió a las voces críticas de la gente: “A la afición hay que darle, no hay que pedirle nada. Lo que opinen es importante y lo valoro. A los que no están contentos, vamos a trabajar para que el domingo estén satisfechos... Debemos demostrar que merecemos estar en Liga A para que disfruteis de ver a la Selección con otros rivales. Hay cosas que se pueden mejorar", agregó.

Sin embargo, siempre lanzó su mensaje de optimismo: “Pensemos dónde estábamos en enero pasado y dónde estamos ahora. Hay que trabajar, ser humildes, respetar a los rivales y a seguir".