Otro bombazo en la Coppa. Después de la eliminación del Nápoles, el Inter de Milán cayó en los octavos de final de la Coppa de Italia (1-2) ante el Bolonia de Thiago Motta, que se medirá en cuartos a la Fiorentina. El partido acabó con 0-0 y Carlos Augusto adelantó a los de Inzaghi en el primer minuto de la prórroga, pero los goles de Beukema y Ndoye le dieron la vuelta al marcador para echar del torneo al vigente campeón. Y lo que es peor, Lautaro Martínez, que falló un penalti, acabó lesionado y con gestos de preocupación.
La primera parte comenzó con ritmo, con los dos equipos plantados de forma similar en el campo. En realidad, los dos pretenden lo mismo. Sacar el balón jugado desde atrás y presionar arriba. Eso provocaba que se anularan mutuamente, pues ambos conjuntos estaban intensos, metidos en el partido. Inzaghi reservó algún jugador, pero tampoco muchos, porque el Bolonia no era un rival cualquiera. Cuarto en la Serie A y con un juego atractivo de la mano de un Motta que sigue con su ascendente carrera en los banquillos.
Klaassen fue el primero que lo intentó para los lombardos, con un disparo desde la frontal que se fue arriba. Pero el equipo de la Emilia-Romaña respondió rápido, con un remate con la espuela de Fabbian que enmudeció San Siro, con una gran entrada y un mejor ambiente a pesar del día, la hora y el frío. Le tocaba al Inter, que reclamó penalti por una zancadilla de Corazza a Lautaro. Lo pareció, pero siguió el juego, antes de que llegara la mejor ocasión de la primera parte. Una combinación de Klaassen y Carlos Augusto acabó con un centro del brasileño al que Frattesi puso el interior para ponerla pegada al palo, pero Ravaglia se lució.
Poco más peligro hubo hasta el descanso, con las dos escuadras anulándose y tratando de no cometer errores que las penalizasen. Todo por decidir con la igualdad por bandera al término de los primeros 45 minutos.
El segundo acto comenzó movido, con un primer acercamiento del Inter (otra vez Frattesi, que no conectó con el balón con todo a favor) y con dos del Bolonia que no pasaron a mayores pero que sí ponía en alerta a los de Simeone Inzaghi, que comenzaron a mandar y a merodear más el área. En su sexto córner a favor, el joven Corazza cometió la imprudencia de saltar con el brazo extendido. Penalti tras aviso del VAR. Lo lanzó Lautaro, con fuerza, abajo, pero Ravaglia le adivinó la intención.
Siguió mandando el Inter y Lautaro quiso redimirse desde la frontal, con la izquierda, pero la mandó arriba. Decidió Simone mover el banquillo y metió a tres piezas importantes de una tacada: Dimarco, Thuram y Barella. Inclinaron más el campo los lombardos, que tuvieron una clara por medio de Dimarco, que no llegó a pegarla bien, de puntera, muy centrada para un gran Ravaglia. Cinco de descuento para evitar la prórroga. Nada. Más fútbol.
PRÓRROGA MOVIDA
Y fue comenzar la prórroga y marcar el Inter. Dimarco botó el undécimo saque de esquina con una rosca perfecta para que Carlos Augusto se elevara, sin marca, para picarla abajo. Esta ya imposible para Ravaglia. La mala noticia para el Inter llegaría poco después. Se marchó tocado Lautaro, llevándose la mano a la ingle y con gesto serio, muy serio. Tendrá que pasar pruebas.Se fue arriba el Bolonia, ya sin nada que perder, y en su primer córner de la noche, y también en su primer remate a puerta de la noche, empató. Zirkzee la cazó en el segundo palo, sobre la línea, y la puso atrás para que Beukema pusiera el interior y la mandara dentro. Mazazo en San Siro. Pero habría más. Porque en una contra, el neerlandés habilitó a Ndoye, que también había salido de refresco, y picó ante la salida de Audero para poner el 1-2. Primer gol del suizo en el curso. Final. El Bolonia a cuartos. El Inter, eliminado y en vilo por Lautaro.
