El delantero brasileño deberá cumplirla la pena en la competición liguera y que no le impedirá disputar la Supercopa de España.
La resolución del Comité hecha pública este martes sobre el incidente que se produjo en el duelo aplazado de la duodécima jornada confirma que el brasileño deberá cumplir "dos partidos de suspensión por producirse de manera violenta al margen del juego, no estando en posibilidad de disputar el balón o el juego detenido".
Además del tema deportivo, el Comité impuso una multa económica de 700 euros al club y de 600 euros al jugador.